PAÍS
Mientras el subsecretario del Interior Rodrigo Ubilla informó 15 fallecidos en todo el país, 11 de ellos en la Región Metropolitana, los datos entregados por el jefe de la Defensa Nacional para la Región Metropolitana, general Javier Iturriaga, son distintos, porque habló de 7. Todos «calcinados en los lugares donde se produjeron los actos vandálicos», según su versión. El balance de Interior sobre regiones indica que hay 4 muertos (La Serena, Coquimbo, Talcahuano y Curicó en la Ruta 5 Sur).
El subsecretario del Interior, Rodrigo Ubilla, ofreció esta mañana desde el Palacio de la Moneda un balance de las protestas que se han tomado todo el país y confirmó que ha habido 15 fallecidos y 2.643 detenidos.
«En concreto, a hoy hay un total nacional de 15 muertos, 11 de ellos en la Región Metropolitana, todos asociados a quemas y saqueos principalmente de centros comerciales», dijo el subsecretario.
«Dos en un Líder de San Bernardo, cinco en la empresa Kayser, uno en Quinta Normal, uno en un supermercado Santa Isabel y dos en La Pintana, en Construmart», complementó.
Ubilla también dio cuenta de 4 muertos en regiones: uno en La Serena, uno en Coquimbo, uno en Talcahuano y otro en la Ruta 5 Sur, este último en referencia al caso de Curicó donde falleció de un disparo el joven José Miguel Uribe Antipani.
El subsecretario aseguró que ha habido «una disminución significativa de los hechos asociados a saqueos, vandalismo y delincuencia».
«Si comparo el informe de las 08:00 horas del 21 de octubre con el informe de hoy (…) se observa una disminución significativa de hechos de violencia. En total, ayer informamos 350 y hoy, en las últimas 24 horas, se han producido 255, casi 100 menos», explicó.
Rodrigo Ubilla considera que los ataques a la infraestructura pública ocurridos el lunes demuestran que se trata de una «acción concertada. Partimos con el ataque e intento de destrucción de las líneas del Metro en la Región Metropolitana y muchos buses el viernes».
«Después nos fuimos a un fin de semana marcado por el intento de saquear supermercados, ferias, donde la población no solo de la Región Metropolitana sino que de todo el país se abastece normalmente de alimentos», agregó.
Finalmente, la autoridad sostuvo que el Ministerio del Interior está presentando querellas por la Ley de Seguridad del Estado, «y esperamos que el Ministerio Público nos apoye en estos casos y que los tribunales condenen a estos delincuentes».
Las cifras de Ubilla (11 muertos en Santiago) contrastan con las entregadas antes por el jefe de la Defensa Nacional para la Región Metropolitana, general Javier Iturriaga, y nuevamente evidencian un descuadre entre los datos que manejan las autoridades.
El jefe castrense informó de 7 civiles muertos en la RM, y remarcó que no hubo responsabilidad militar en estos hechos, porque fueron encontrados «calcinados en los lugares donde se produjeron los actos vandálicos».
En su reporte de la tercera noche de toque de queda, el jefe uniformado añadió que hubo 932 detenidos, 6 civiles heridos y 49 funcionarios de Ejército, carabineros y PDI lesionados. El caso más grave –dijo- es el de una detective que resultó herida de gravedad.
«En general la ciudad estuvo tranquila anoche (…). A partir de las 22-23 horas ya había muy poco movimiento, salvo algunos casos muy aislados de personas que definitivamente no entienden nada. Pero la ciudad durmió tranquila. Hay solamente unos hechos menores que producen los delincuentes de siempre», agregó.
Iturriaga también hizo referencia a las denuncias sobre abusos de militares en los controles durante el toque de queda. «Hay videos que andan circulando donde se busca acusarnos de violencia desmedida (…). Los controles de identidad en los toques de queda es para poder proteger a la gran masa de chilenos (…) el llamado es que a no se resistan», dijo.
Respecto a posibles manifestaciones durante la jornada, señaló que “durante el día todas las marchas o actos públicos masivos, que los ciudadanos con justo derecho quisieran realizar, llamarlos para que vengan, coordinemos y junto con Carabineros y la Intendencia podamos autorizar todos los actos y marchas que quisieran desarrollar. Estamos dispuestos a conversar con los dirigentes, con los que están a cargo, para que podamos ver la mejor solución para todos».
