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En una reunión entre los miembros de la Catedral Evangélica, el controvertido pastor se defendió de sus detractores asegurando que «nunca ha dejado de trabajar para la iglesia» e insistió en que “no renunciaré a la obra que el señor me dio”.
En otro capítulo del largo historial del polémico obispo Eduardo Durán, este martes se conoció un audio de una reunión en la Catedral Evangélica celebrada por el pastor con autoridades, ayudantes y predicadores de la Primera Iglesia Metodista Pentecostal.
En el encuentro, grabado en un audio al que tuvo acceso Radio Bío Bío, el religioso aseguró que “a lo mejor cometió errores” y que “su situación personal se va a solucionar”, aludiendo a su convulsionada vida amorosa, tras anunciar su divorcio y posterior matrimonio con su reciente pareja en medio de una polémica de infidelidad.
En ese sentido, Durán defendió su decisión de contraer nupcias por segunda vez, insistiendo en que “es muy difícil para una persona estar sola, tener que hacer sus propias cosas, planchar su ropa, en fin, hacerse en la mañana un desayuno”.
Los detractores del pastor hacen hincapié en un pasaje bíblico de la Iglesia Evangélica que estipula que los obispos deben ser “marido de una sola mujer”, “no ser codicioso de ganancias deshonestas, ni avaro” y “tener buen testimonio de los de afuera, para que no caiga en descrédito y en lazo del diablo”, puntos vulnerados claramente por Durán. Sin embargo, a pesar de las pruebas existentes en su contra, el obispo afirmó que “jamás he ido en contra de lo ordenado por Dios en el sentido de la administración de la iglesia”.
El cuestionado pastor se ha excusado con frases como “a mí me colocó el Señor en esta iglesia, yo no lo pedí”. Por eso, Durán afirmó que “no renunciará a la obra que el señor le dio” y enfatizó en que siempre se ha hecho cargo de la iglesia y que no ha faltado ningún día para ejercer sus labores”, pese a que ha sido cuestionado por su excesivo patrimonio de más de mil millones de pesos en avalúo fiscal, y por estar siendo investigado por el Ministerio Público bajo cargos de lavado de activos.
Por último, indicó que todos los que “no quieran seguir bajo su liderazgo, abandonen su templo”, para que así “trabajen libremente y sin problemas”, para que también él “pueda trabajar de la misma forma”.
