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Rodrigo Polanco estará alejado de la facultad mientras la Corte Suprema resuelve la apelación de la Universidad Católica en el proceso interpuesto por una estudiante que acusa al religioso de acoso sexual y que, así, busca repetir la investigación interna que dejó sin culpas al profesor de Teología. La facultad, en todo caso, defendió al académico, señalando que “la universidad estima que la investigación sumaria que se realizó en este caso fue acuciosa, imparcial y que dio pleno cumplimiento a la ley y los estatutos”.
La Facultad de Teología de la Pontificia Universidad Católica decidió adelantar el año sabático para Rodrigo Polanco Fermandois, el influyente sacerdote denunciado por acoso sexual, cuyo caso tiene una arista que debe resolverse en la Corte Suprema y que tiene complicada a la casa de estudios.
De acuerdo con un comunicado firmado por el decano Joaquín Silva, la determinación de “adelantar” para el primer semestre el sabático, que ya estaba aprobado por el consejo de la facultad para el religioso, fue adoptada a solicitud del mismo Polanco.
El sacerdote fue acusado de acoso sexual por una estudiante K. H. M., pero más tarde fue sobreseído en la investigación interna, que desestimó las acusaciones y cuestionó la moralidad de la denunciante. El resultado de la indagatoria dejó al descubierto las excelentes redes de Polanco al interior de la casa de estudios, que incluso lo han hecho inmune al escándalo del otrora poderoso Fernando Karadima, de quien era uno de sus más cercanos, según reveló un reportaje de El Mostrador.
La denunciante, sin embargo, a través de una abogada feminista y fuera de todo pronóstico, logró que la Corte de Apelaciones de Santiago ordenara la apertura del sumario, por lo que el caso pasará a la Corte Suprema.
La decisión judicial fue toda una derrota para la Pontificia, que deberá probar ante el máximo tribunal que no vulneró un derecho constitucional de la alumna, tal como lo consignó la sentencia del tribunal de alzada capitalino del 16 de febrero de este año. De perder, deberá repetir la investigación interna que dejó libre de culpa al prominente teólogo.
Fuentes de la facultad indican que el sabático es un permiso excepcional que se otorga internamente. En la práctica, es concedido cada 10 años, pero en el caso de Polanco ya tomó uno en el año 2012.
El comunicado de la facultad indica, no obstante, que “como se sabe, el profesor Polanco fue sobreseído en el 2018 por la Universidad de una denuncia por supuesto acoso sexual. Su inocencia fue declarada por la Secretaría General y luego por la Comisión de Apelación, por no resultar plausibles los hechos imputados en el primer caso, y la segunda por no haberse ellos acreditado”.
“La universidad estima que la investigación sumaria que se realizó en este caso fue acuciosa, imparcial y que dio pleno cumplimiento a la ley y los estatutos y eso está afirmado en tribunales, sede a la que recurrió la denunciante mediante un recurso de protección”, señala la facultad en un comunicado.
Agrega, además, que “por cuanto la Corte de Apelaciones ha objetado la agregación de ciertos documentos al expediente y ordenado una nueva investigación, y encontrándose pendiente la apelación de la UC en este punto ante la Corte Suprema, el profesor Polanco indica que, no obstante su inocencia, desea evitar que este caso sea utilizado para perturbar la vida académica de nuestra comunidad, alejándose transitoriamente de sus labores docentes mientras la corte resuelve”.
La situación obligó a la facultad a modificar la programación académica, por ejemplo, transfiriendo el curso programado de eclesiología a manos del profesor Fernando Berríos y dejando en suspenso el seminario de investigación.
