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Crédito: Agencia UNO
Para algunos dirigentes mapuches, como el líder del Consejo de Todas las Tierras, Aucán Huilcamán, la medida adoptada por el Gobierno de decretar estado de excepción por los incendios en La Araucanía es una excusa para “militarizar” la zona. Sin embargo, el titular de Desarrollo Social –actualmente el único ministro en funciones del comité político de Palacio– descartó de plano esa tesis y trató de poner paños fríos, precisando que la medida de apelar a las FF. AA. busca “ayudar a las personas mapuche y no mapuche de la zona, de manera tal de controlar los incendios que han afectado a todos”.
El ministro de Desarrollo Social, Alfredo Moreno, oficia por estos días a cargo de La Moneda y el tema de La Araucanía sigue presente en su agenda. Es así como, esta jornada, debió salir a justificar el estado de excepción constitucional decretado para la región, junto con zonas del Bío Bío y Región de Los Ríos, debido a los inclementes incendios forestales que asolan a estos territorios.
Para algunos dirigentes mapuche, como el líder del Consejo de Todas las Tierras, Aucán Huilcamán, la medida adoptada por el Gobierno es una excusa para “militarizar” la zona.
Según explicó ayer el Ejecutivo, el estado de catástrofe permitirá contar con la “participación directa de las Fuerzas Armadas para asegurar el control del orden público necesario para combatir y prevenir los incendios” y, para ello, nombró al general de Brigada del Ejército, Rodrigo Pino Riquelme, en La Araucanía, con el objetivo de “coordinar todos los servicios y organismos públicos, y fortalecer la red de apoyo logístico para enfrentar estos siniestros”.
Según Huilcamán, el estado de catástrofe no resuelve el combate de los incendios y, con el estado de excepción, “el Gobierno encontró una manera de militarizar la región donde habita el pueblo mapuche. Lo habían intentado con la Operación Huracán y con el cobarde asesinato de Camilo Catrillanca”.
El encargado de responder estas críticas fue, precisamente, el ministro Moreno, quien ha estado en el ojo del huracán por la política de diálogo impulsada con todos los sectores, que le ha valido duras críticas de parte de los gremios empresariales de la zona, cuyos representantes, incluso, lo acusaron de validar a violentistas. Estos sectores llegaron a declararlo persona non grata.
Ante esta denuncia de Huilcamán, y sin ánimo de entrar en polémica, Moreno trató de poner paños fríos, precisando que “en este caso lo que están haciendo es al contrario, ayudar a las personas mapuche y no mapuche de la zona, de manera tal de controlar los incendios que han afectado a todos”.
“Las dos personas que han fallecido son mapuche, varias de las viviendas destruidas y los terrenos que han sido afectados son mapuche, así que hoy día todas las personas en la zona están sufriendo mucho”, indicó.
“Al contrario, yo creo que lo que en este caso hace es colaborar para que todos los medios puedan ser ordenadamente puestos a disposición de la lucha contra los incendios”, complementó el ministro.
