PAÍS
Los gestos de abuenamiento de la Democracia Cristina con el Gobierno no serán extensivos para el tema de los derechos de agua, a juzgar por la fuerte declaración del consejo nacional del partido ante los planes del Ejecutivo para el proyecto que se tramita en el Congreso.
El consejo nacional de la Democracia Cristiana emitió una dura declaración a raíz de los planes del Gobierno respecto al proyecto de ley que modifica el Código de Aguas, la que actualmente se encuentra en segundo trámite legislativo en el Senado.
Mediante una declaración, la colectividad expresó su “convicción de que el acceso al agua es un Derecho Humano y que cualquier legislación o regulación debe garantizar que así sea” y además subraya que “el agua es un bien nacional de uso público y los derechos de agua deben contemplar aquello”.
En esta línea, el partido señala enfático su “rechazo al intento del Gobierno de Sebastián Piñera de proteger a los especuladores del agua, otorgándoles derechos perpetuos. Una medida así resulta inaceptable”.
Con esta declaración, queda claro que los gestos de abuenamiento de la Democracia Cristiana con el Gobierno no serán extensivos para el tema de los derechos de agua. La polémica estalló luego que el ministro de Obras Públicas Juan Andrés Fontaine anunció una indicación sustitutiva que contempla consagrar la “perpetuidad” de los derechos -o duración indefinida, como intentó aclarar más tarde- en lugar del límite de 30 años que establecía el proyecto ingresado por el Gobierno anterior.
En su declaración, la DC plantea otras medidas como “comprometer el apoyo a que el agua es un Derecho Humano y por lo tanto su primera prioridad es el consumo humano”.
Asimismo, plantea la necesidad de “asegurar que se mantengan los derechos actuales a pequeños agricultores y comunidades indígenas”.
Finalmente, la DC se compromete a “apoyar que los nuevos derechos sean renovables como ha sido aprobado en el Congreso” y a “defender a todas las reservas de agua, fundamentalmente glaciares y acuíferos”.
