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El columnista volvió a cuestionar el proyecto de “Admisión Justa”, señalando que esta iniciativa y sus justificaciones revelan “la verdad ideológica de la derecha; una verdad que, sin embargo, ella se niega a defender de manera explícita”. En especial, el rector de la Universidad Diego Portales, Carlos Peña, arremetió contra la frase “industria de la educación”, señalando que este concepto, desplegado por el Mandatario, es “una verdadera confesión involuntaria” que demuestra la real cara de Piñera.
Luego de hacer trizas la idea de meritocracia que enarboló el Gobierno en su proyecto bautizado como “Admisión Justa” , el rector de la Universidad Diego Portales, Carlos Peña, volvió a arremeter contra la iniciativa del Gobierno, esta vez por los dichos del Presidente Sebastián Piñera, quien se refirió a la educación como a una “industria”.
A través de una columna titulada “El inconsciente de la derecha”, publicada en El Mercurio, el abogado sostiene que “el proyecto llamado de admisión justa y la forma que tuvo el Presidente de justificarlo muestran, como en un retrato fidedigno, la verdad ideológica de la derecha (…). Una verdad que, sin embargo, ella se niega a defender de manera explícita”.
El proyecto que desmantela la Ley de Inclusión aprobada en el Gobierno de Michelle Bachelet ha recibido duras críticas de parte de expertos del mundo de la educación. Además, se vislumbra que tendrá un difícil trámite legislativo, dado que las bancadas de oposición –incluyendo a la DC– han anunciado su rechazo a la idea de legislar, acusando un “extremismo ideológico”. La iniciativa fue ingresada sin urgencia, por lo que se espera que su discusión recién comience en marzo.
En su columna, Peña insiste en refutar la tesis de la meritocracia desplegada por la derecha para justificar el proyecto, señalando que la derecha “llama mérito al resultado con prescindencia de los factores que lo produjeron”.
En ese sentido, indica que ese sector político “se esmera en torcer el significado de los conceptos hasta llamar mérito a lo que, en los grandes números, esos que según Tolstói configuraban el misterio de la vida, es simplemente prerrogativa hereditaria o natural”.
Luego, se centra en la frase de “industria de la educación”, que el Presidente empleó para defender el proyecto este lunes en una reunión con directores de Liceos Bicentenario.
Peña interpreta este concepto desplegado por el Mandatario como “una verdadera confesión involuntaria” que revela la real cara de la derecha y de Piñera, quien al día siguiente de su enunciación quiso cambiar el concepto de “industria de la educación” por el de “comunidad escolar”.
“Es imposible eludir el significado de las palabras presidenciales sin faltar el respeto al Presidente diciendo que no sabe lo que dijo. Por supuesto, lo sabe, aunque de manera inconsciente. Es su verdad oculta que cada cierto tiempo, cuando el entusiasmo debilita la censura, aflora”, indicó el rector.
Así, finaliza, poniendo acento en que la frase revela una concepción de “la sociedad como un quehacer industrial, un campo de fuerzas donde se pone en juego la sagacidad de cada uno. Lacan definía al inconsciente como ‘el discurso del otro’, el discurso que proveía el lugar donde cada uno había sido socializado, el esquema simbólico que cada uno había recibido para mirar el mundo (…). El Presidente acaba de revelar el suyo”.
