Según informó el New York Times, la pareja de Upper East Side, se encuentra ‘recluida’ en Italia, debido a que el Departamento de Estado de EE.UU. les impidió el regreso a dicho país, luego de que la pareja, junto a sus cuatro hijos, tomaran unas vacaciones en Europa.
Un nuevo episodio se escribe en el caso de la chilena Felicitas del Carmen Villanueva Garnica (50), quien el año pasado denunció que sus empleadores, Malú Custer Edwards —hija de Isabel Edwards y Felipe Antonio Custer– y Micky Hurley, la llevaron a los Estados Unidos “de manera fraudulenta y con el propósito de obligarla a cuidar ilegalmente a sus hijos pequeños”.
Según informó el New York Times, la pareja de de Upper East Side, se encuentra ‘recluida’ en Italia, debido a que el Departamento de Estado de EE.UU. les impidió el regreso a dicho país, luego de que, junto a sus cuatro hijos, tomaran unas vacaciones en Europa.
La razón, Malú Custer Edwards debía renovar su visa de estudiante, hecho que fue negado por el Consulado de EE.UU. el 9 de septiembre.
Villanueva Garnica comenzó a prestar servicios para la pareja en Chile, en diciembre de 2010, cuando una agencia de empleos la envió a la familia, cuyas raíces están profundamente arraigadas en la sociedad chilena.
La mujer alega en los documentos judiciales que “los infernales tres meses de trabajo forzoso no eran más que servidumbre involuntaria”. Asimismo, cuenta que era constantemente reprendida, maltratada, permaneciendo enclaustrada bajo instrucciones de no hablar con nadie fuera de la familia ni salir de la casa.
Hurley la encerraba en la habitación con los niños y “a veces terminaba durmiendo en el suelo de cualquier habitación en la que estaban encerrados (…). Él iba a cerrar la puerta y decía: Quédate allí hasta que yo lo diga”.
El relato, detalla que en los tres meses que trabajó para la familia, con jornadas de 12 horas diarias para atender a los hijos, solo tuvo un día libre.
Y que además, la pareja socialité —Edwards es diseñadora gráfica y Hurley un decorador de interiores– se comprometió a pagarle US$ 10 por hora, pero le dio sólo US$ 800 mensuales, lo que equivale a US$ 2 por hora.
Cuando la asesora del hogar protestó, Custer Edwards le respondió que: “No hay otras niñeras en los EE.UU. que ganen más de US$ 700 por mes”.
Por otra parte, según la demanda, los niños, de 6, 8 y 10 años, en repetidas ocasiones la golpearon y una vez le estrellaron la puerta del refrigerador en la cabeza con tanta fuerza que casi perdió el conocimiento.
