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Mario Zumelzu: el abogado tras las polémicas jugadas políticas de Evelyn Matthei Entregó a la candidata antecedentes del no pago de imposiciones en colegios de hermanos Parisi

Mario Zumelzu: el abogado tras las polémicas jugadas políticas de Evelyn Matthei

Siendo asesor del senador Beltrán Urenda conoció a la ex senadora, a quien también comenzó a prestar servicios en materias legislativas. Juntos apoyaron la denuncia de consumo de drogas al interior del Parlamento del ex ministro Francisco Javier Cuadra. Un caso que terminaría frenando su designación como director nacional de Aduanas en 2011. Gracias a la amistad con Matthei logró ingresar de otra forma al sector público: cuando ella era ministra del Trabajo, instruyó al IPS a que lo contratara como asesor en el caso de los falsos exonerados políticos con un sueldo varias veces mayor que el resto de los abogados. Debió renunciar cuando asumió la vocería de la campaña de su amiga de tantas batallas.


Conoció a Evelyn Matthei en 1993 a través del empresario y fallecido senador UDI Beltrán Urenda, a quien asesoraba en materias legislativas. Urenda postulaba a la reelección por la V Región Costa mientras ella buscaba una diputación  independiente apoyada por la UDI en San Antonio. “Hacían campaña juntos y ahí nos hicimos amigos con la Evelyn”, afirma el abogado Mario Zumelzu que, a partir de 1995, también comenzó a asesorar a Matthei en temas legales. Armaron una dupla que trascendió el Congreso e hizo noticia por los casos que él patrocinó en tribunales y la puso a ella en las primeras planas.

El primer episodio en el que trabajaron juntos se originó en la afirmación de Francisco Javier Cuadra –“algunos parlamentarios consumen drogas (en el Congreso)” a la revista Qué Pasa– que concluyó con una condena de 540 días para el ex ministro, a raíz de la querella por injurias y calumnias por ofender a una dignidad del Estado presentada por parlamentarios de RN, la Cámara y el Senado. Matthei apoyó sus dichos, aportó gran parte de los testigos, pero nunca se pudo probar que Andrés Allamand, Alberto Espina e Ignacio Pérez Walker eran los supuestos consumidores, según relata el libro “La historia oculta de la transición”, del periodista Ascanio Cavallo.

Zumelzu explica cómo se involucraron en el caso: “Después de la entrevista que causó gran revuelo estábamos en el ascensor de la Cámara y un funcionario del Congreso nos pidió hablar, nos contó historias muy impactantes, le entregamos esos antecedentes a Pablo Longueira y él hizo la denuncia en tribunales (Tercer Juzgado del Crimen de Valparaíso)”.

Esa acción legal –continúa– “concluyó hace dos años con más de diez condenados, todos funcionarios del Congreso en su momento y personas que llevaban la droga –cocaína, precisa– al Parlamento”.

[cita]Al interior del IPS, que depende de Trabajo, su llegada y remuneración ($5,5 millones) no pasaron inadvertidos. Zumelzu es un penalista –arista que lleva el Ministerio del Interior– y el proceso en el IPS es de carácter administrativo, ya que se debe acreditar si existió una relación laboral entre una empresa estatal y los dos mil beneficiados que fueron cuestionados por la Contraloría General de la República. [/cita]

Por ese caso, el abogado Zumelzu no pudo asumir como director nacional de Aduanas en abril de 2011. El nombramiento estaba listo, él había renunciado a la presidencia de Schwager Energy, la empresa de la familia Urenda que ahora se dedica a explotar biogás y a prestar servicios a Codelco, pero a último minuto el Presidente Sebastián Piñera no firmó el decreto.

Nunca hubo una explicación oficial, pero todas las miradas apuntaron a Andrés Allamand como el responsable de frenar la designación por el rol que Matthei y su asesor jugaron en el episodio que lo involucró en un supuesto consumo de drogas.

“No tengo idea por qué el Presidente no firmó el decreto. De repente a uno le pasan la cuenta y no tiene idea por qué. Y, a estas alturas, no me interesa”, sostiene el abogado que en su momento se vio muy golpeado por la noticia.

Cuando Zumelzu asumió la vocería del comando de la candidata de la Alianza, el 3 de septiembre, en el Ministerio del Trabajo repararon en su nombre. El había sido contratado por instrucción de Matthei, mientras era ministra de la cartera, como abogado en el caso de los falsos exonerados políticos en el Instituto de Previsión Social, con un sueldo de $5,5 millones desde junio a diciembre, aunque en junio se le canceló un primer pago de $7,7 millones revela la página Gobierno Transparente del IPS. Por aquellos cruces de la política, el sucesor de la candidata en el ministerio, Juan Carlos Jobet, resultó ser un férreo seguidor de Allamand, trabajó en su comando durante las primarias de la Alianza y tampoco olvidó el oscuro capítulo del consumo drogas en el Congreso.

Al interior del IPS, que depende de Trabajo, su llegada y remuneración no pasaron inadvertidos. Zumelzu es un penalista –arista que lleva el Ministerio del Interior– y el proceso en el IPS es de carácter administrativo, ya que se debe acreditar si existió una relación laboral entre una empresa estatal y los dos mil beneficiados que fueron cuestionados por la Contraloría General de la República.

Hubo molestia también porque los diez abogados contratados a honorarios para trabajar en el tema percibían entre $1 millón y $1,5 millones mensuales, cinco veces menos que el penalista.

El IPS decidió suspender sus servicios –el 27 de agosto recibió su último sueldo– dado el conflicto entre ejercer una función pública como abogado, ser vocero de una campaña y manejar información sensible como es la de los exonerados políticos.

Operación Parisi

La denuncia sobre las imposiciones impagas de los profesores de los colegios Las Américas y La Fontaine, administrados por los hermanos Antonino, Franco y Zandra Parisi, tiene su origen en una investigación que hizo el abogado Zumelzu después del debate de la Anatel en Coquimbo.  El  “economista del pueblo” emplazó constantemente a Matthei y ella lo ignoró. “Pobrecito –dijo– quiere robar cámaras, no lo voy a inflar”.

“Nos llamó la atención la violencia de Parisi al día siguiente. Habló de prácticas matonescas, se victimizó. Frente a eso dijimos ¿por qué será?, y empezamos a buscar. Nunca me había preocupado de Parisi, lo encontraba medio payasito. Había información sobre desórdenes administrativos en los colegios y buscamos en la página del Poder Judicial y aparecieron las demandas laborales”, afirma el abogado, quien agrega que luego tomaron contacto con apoderados de los establecimientos.

El resto es historia conocida: Matthei hace públicas las deudas en el programa «Patio de los Naranjos» de Mega. Zumelzu explica que ascienden a $150 millones, “ellos tomaron los colegios en enero de 2011 y en junio dejaron de pagar (los aportes previsionales)”. Afirma que cuenta con nuevos antecedentes sobre el emprendimiento educacional de los Parisi, que pronto serán dados a conocer.

Nacido y criado en Quillota, a donde su padre llegó a ejercer como médico y fue director por varios años director del Hospital de la ciudad, estudió Derecho en la Universidad Católica de Valparaíso, vive en la Quinta Región, juega golf en el Club de Granadillas de Viña y es un amante de la hípica. Una pasión que le contagió Beltrán Urenda, con quien tuvo siete caballos, uno de ellos, Sam Forli, el mejor del año 2004.

Militante de la UDI desde el nacimiento del partido y antes activo miembro del Movimiento Gremial, conoció a Jaime Guzmán y dice que él ayudó en su memoria dedicada al financiamiento de los partidos políticos. Entre sus amigos se cuenta el ex alcalde de Recoleta, Gonzalo Cornejo, socio de su estudio, a quien conoció en la juventud en la UDI y fue querellado por fraude al Fisco y negociación incompatible a raíz de los contratos suscritos con GMA, de propiedad de funcionarios del municipio de su estrecha confianza. La causa fue archivada, pero salpicó a la diputada UDI, Claudia Nogueira, mujer de Cornejo, cuya defensa tomó el abogado cuando fue acusada de defraudar al Fisco, al descubrirse que en la cuenta corriente bipersonal que compartía con su marido había pagos de asesorías parlamentarias –entre ellas, a un socio de GMA que luego fueron devueltos a su cuenta corriente y un arriendo simulado de una sede parlamentaria. Finalmente, ella debió restituir $30 millones y donar $5 millones a un Techo para Chile.

Matthei fue una de las que defendió a Cornejo cuando éste renunció a la UDI, diciendo que él había sido “crucificado” por el partido y que, al visitar el municipio de Recoleta, quedó impresionada por la calidad de los programas de GMA. “Ya se lo quisieran las mejores empresas privadas en Chile”.

Experto en casos de fraude al Fisco

La dupla Matthei-Zumelzu estuvo, hace algunos años, detrás de la querella por fraude al Fisco en contra del entonces alcalde de Coquimbo, Pedro Velásquez, quien no pudo asumir la vicepresidencia de la Cámara al hacerse público que no había pagado una deuda por $280 millones con el municipio.

Otra de sus defensas fue la del ex intendente de Valparaíso, el DC Iván de la Maza, acusado también de fraude al Fisco por el extravío de $500 millones y en cuya causa el Ministerio Público decidió no perseverar. “Cuando en el caso drogas salieron pegándonos a Evelyn y a mí, Iván de la Maza, que no me conocía, me defendió públicamente diciendo que era un abogado joven de la región, que confiaba en mi honorabilidad. Le fui a dar las gracias y le dije te debo una. Cuando apareció la denuncia fui a su oficina y le dije ahora me toca a mí”.

Fue abogado de Marta Isasi en la acusación por mal uso de asignaciones parlamentarias cuando ella era parte de la bancada de la UDI. Se logró acreditar su inocencia y este año, ya alejada del partido, ella le pidió que la defendiera al ser acusada por su ex asesor Giorgio Carrillo de recibir $25 millones de Corpesca, empresa del grupo Angelini, previo a la votación de la Ley de Pesca. A Matthei no le hizo gracia que su amigo apoyara a la diputada con la que se trenzó en una discusión en la que se trataron con violencia, pero Zumelzu asegura que la candidata entendió que era su trabajo. A poco andar, sin embargo, el abogado dejó la causa porque, según explica, está radicada en Iquique y le toma mucho tiempo viajar a la región.

A Beltrán Urenda le debe mucho. No sólo fue su asesor parlamentario entre 1991 y 2001, también prestó servicios en Agunsa, la empresa de agenciamiento de naves de la familia del fallecido senador, y participó en el directorio de Schwager Energy entre 2005 y 2011, donde coincidió con la hermana de la candidata, Hedy Matthei, en el período 2008-2010. “Había un asesor suyo en el Parlamento que fue mi profesor ayudante, Alvaro Pinedo, y cuando supo que estaba titulado me invitó”, cuenta Zumelzu, quien juró como abogado a los 28 años, instaló una oficina y al poco tiempo se convirtió en asesor de Urenda. Gracias al fallecido senador ingresó a un mundo que le dio contactos, exposición mediática y una cuota no menor de poder.

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