«Tengo una buena evaluación del trabajo del ex fiscal Peña, y pido que no lo satanicen», dijo el titular de Interior.
El ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter, se refirió esta mañana en Radio Cooperativa a las acusaciones de montaje por el bullado «caso bombas».
«No nos imputen hechos tan burdos. Yo no llegué al Gobierno para hacer leseras (…) si un ministro del Interior participara en un montaje sería un delito», sostuvo el secretario de Estado.
«En Chile han aumentado las bombas, partieron siendo de sonido y cada día han ido siendo más destructivas… no veo porqué tanto alboroto porque el ministro del Interior le interese ese proceso y que la justicia haga su trabajo», agregó el jefe de gabinete.
Ante la pregunta sobre la desestimación de la mayoría de las casi cinco mil pruebas, Hinzpeter dijo que le producía «desazón, pues el juez que revisó las pruebas tuvo un criterio demasiado garantista… yo confío en la labor del Ministerio Público».
«Tengo una buena evaluación del trabajo del ex fiscal Peña, y pido que no lo satanicen», dijo, refiriéndose a su actual empleado en Interior en la División de Estudios del ministerio.
«Este no es un proceso que se ha llevado adelante por un capricho; aquí se ha pretendido instalar que aquí hubo un capricho del ex fiscal Peña, al que se le ocurrió, casi por presión mía, formalizar a ciertas personas. Eso en nuestro país no es posible ni ocurre», concluyó.
Esta semana comenzaron los alegatos de clausura del caso bombas y se espera que este viernes se dé por cerrado la polémica causa.
