Señor Director:
Frente a una publicación de El Mostrador, relativa a ajustes introducidos por nuestra institución a la norma sobre densidad de cultivo de salmones, resulta necesario efectuar las siguientes observaciones.
Durante 2018, la Subsecretaría de Pesca y Acuicultura realizó una serie de ajustes a la normativa de densidad de cultivo, medida que consiste en que la subsecretaría determina el número máximo de ejemplares a ingresar en las jaulas de cultivo, a fin de evitar el hacinamiento de los peces y la aparición de enfermedades. Tal número depende del comportamiento ambiental y sanitario del centro de cultivo.
Nos preocupó el crecimiento descontrolado que la industria estaba proyectando en los próximos dos años, particularmente en la Región de Aysén, sin que a su vez ello viniera aparejado con un desempeño ambiental y sanitario óptimo. De hecho, precisamente en Aysén se presentó un caso de Isa el año pasado.
Como Gobierno, decidimos actuar oportunamente, porque con la crisis del virus del año 2007, aprendimos que la densidad de cultivo y el número de peces en el agua es una variable que debe controlarse. Mientras más peces hay en el agua es más alto el riesgo sanitario y eso significa poner en peligro a toda la industria.
De esta forma, la Subsecretaría ajustó los niveles de densidad de cultivo, de tal modo de hacerlos más estrictos frente a malos resultados sanitarios o
ambientales y a drásticos aumentos de producción. No es correcto afirmar que en la determinación de la densidad de cultivo solo se consideran las proyecciones de siembra de la industria, por cuanto la medida considera, además, el comportamiento sanitario y ambiental y productivo.
En este punto, corresponde rectificar una versión errónea que reproduce la nota: no estamos fijando cuotas de producción, como algunos actores de la industria señalan, porque cada productor decide cuántos peces va a producir en su centro de cultivo. La densidad se traduce solo en determinar el número máximo de peces que se pueden ingresar por cada jaula para evitar el hacinamiento.
Eduardo Riquelme P.
Subsecretario de Pesca y Acuicultura.
