Opinión
De acuerdo a nuestra experiencia y a los estudios que hemos realizado, podemos constatar que modificaciones como estas inciden en que las personas trabajen menos estresadas y con más tiempo para compatibilizar sus gustos y vida familiar con el trabajo. De hecho, una de nuestras mediciones establece que el 66% de los chilenos valora la preocupación de la empresa por su bienestar laboral y personal.
Hace algunos días el Presidente Sebastián Piñera presentó al Congreso un proyecto de ley que busca crear una modernización laboral, con énfasis en la conciliación entre el trabajo y tiempo libre de los colaboradores. Esta iniciativa podría permitir una reducción de las jornadas laborales de la semana, con una modalidad de 4×3, haciendo más adaptables los tiempos laborales a las distintas realidades y necesidades de cada trabajador.
El hecho es que, pese a que desde Laborum.com consideramos que abordar iniciativas sobre flexibilidad podría ser interesante, lo cierto es que también hay aspectos que pueden llegar a no ser totalmente beneficiosos para los colaboradores. Por ejemplo, mantenerse más tiempo dentro de la oficina, llegando a las 11 horas diarias, con tiempos de colación menos extensos, son puntos que aún deben detallarse. Aristas como estas pueden afectar la combinación entre trabajo y vida personal, por el poco tiempo libre que queda el estar todo el día dentro de una oficina.
Las políticas de organización dentro de cada empresa pueden llegar a ser más importantes que la propia flexibilidad horaria. Esto, porque hemos podido constatar que el cumplimiento de horarios frente a un escritorio, muchas veces no es el método más eficaz para fomentar la productividad por parte de los colaboradores o una mayor eficiencia para el buen funcionamiento de la organización.
Desde Laborum.com recomendamos que, tanto los empleadores como colaboradores, organicen sus jornadas laborales y trabajos sobre la base de objetivos y/o mediciones mensuales e incluso semanales, sin importar los horarios o el tiempo del trabajador, pues así los deberes podrían concretarse de manera eficiente, para garantizar un funcionamiento adecuado. Quienes trabajan sobre la base de estos sistemas, incluso, pueden optar por incluir modalidades como teletrabajo, pues sin importar el lugar de dónde se desempeñen las funciones, estas deben concretarse en un plazo determinado.
De acuerdo a nuestra experiencia y a los estudios que hemos realizado, podemos constatar que modificaciones como estas inciden en que las personas trabajen menos estresadas y con más tiempo para compatibilizar sus gustos y vida familiar con el trabajo. De hecho, una de nuestras mediciones establece que el 66% de los chilenos valora la preocupación de la empresa por su bienestar laboral y personal.
Considerar estos elementos podría incidir directamente en una mayor optimización de las tareas diarias y que quienes formen parte de una compañía alcancen una mejor calidad de vida, además de poder incrementar su desempeño de manera paulatina y acorde a los objetivos establecidos en cada compañía.
