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Crédito: Agencia UNO
No es la primera vez que el Ejecutivo se juega por dividir un proyecto de ley, ya que lo mismo ocurrió en marzo con el proyecto de Admisión Justa liderado por el Ministerio de Educación.
Emulando la estrategia adoptada con otros proyectos de ley, el Gobierno decidió ingresar esta semana una “ley corta” al Parlamento, con el objetivo de destrabar la reforma a la Ley Antiterrorista.
“Dada la necesidad de poder contar con instrumentos investigativos más eficaces, como los que tiene la ley de drogas, el Presidente Piñera ha decidido dividir el actual proyecto en trámite y enviar un proyecto solo con las modificaciones para incorporar en la actual ley las medidas investigativas especiales del Código Procesal Penal”, explicó el ministro del Interior, Andrés Chadwick, a La Tercera.
Esta ley corta se abocará solamente a las técnicas especiales de investigación requeridas para que exista una eficiente persecución de conductas contrarias a esta iniciativa.
Según el Ministerio del Interior, esta ley corta representa solo el 5% del proyecto de ley que está en pleno proceso de tramitación en la Cámara Alta, por lo que desde el Gobierno aseguraron que este nuevo mensaje ingresado al Congreso “no deja de lado bajo ningún punto de vista al otro proyecto”.
Asimismo, Chadwick recalcó que “esperamos que esto facilite y apure la tramitación de esta parte del proyecto, donde no debiéramos tener mayores diferencias, porque consiste en permitir a los fiscales, al igual que en otras leyes sobre crimen organizado, poder disponer de estas medidas en las investigaciones de crímenes terroristas”.
Cabe recordar que la tramitación de las modificaciones a la Ley Antiterrorista se encuentra en su primera fase en la Comisión de Constitución del Senado, a un año de su indicación sustitutiva, en abril de 2018.
No es la primera vez que el Ejecutivo se juega por dividir un proyecto de ley, ya que lo mismo ocurrió en marzo con el proyecto de Admisión Justa liderado por el Ministerio de Educación, el cual permite la selección por mérito y cambia algunos aspectos del Sistema de Admisión Escolar (SAE).
Esta nueva iniciativa les atribuye más herramientas a los fiscales en materia de investigación para la de persecución de delitos terroristas, llegando al nivel de los casos que abordan el narcotráfico y el blanqueo de capitales.
Incluye la presencia de agentes encubiertos y reveladores, como también se da visto bueno para la interceptación de comunicaciones.
