PAÍS
El presidente del Consejo para la Transparencia Marcelo Drago nuevamente mostró reparos a la medida implementada por un mall del sector oriente, ya que «hace pagar a justos por pecadores».
El Consejo para la Transparencia volvió a criticar la medida de un mall capitalino, quien decidió instalar un sistema de reconocimiento facial, capaz de detectar a cada persona que entra al centro comercial y tener perfiles de ellos, cruzando la información con las policías.
El año pasado el CPLT ya había mostrado reparos, señalando que «la ciudadanía tiene que exigir a las empresas que se resguarde su información. La gente debe tener claro que en este caso pagan justos por pecadores, porque la gran mayoría de los clientes del centro comercial compran sus productos de manera legal, y el mall tendrá igualmente acceso a sus antecedentes personales, que pasarán a ser parte de una gran base de datos».
Esta vez, y tras recibir un informe de la Policía de Investigaciones que señaló que se realizaron pruebas de reconocimiento facial en “tiempo real” en el Mall Plaza Los Domínicos–desarrolladas en los meses de mayo y junio de 2018-, que permitieron establecer que “el 90% de las identificaciones de rostros realizadas por el sistema fueron falsos positivos (identificación de persona errónea) y el otro 10% se refiere a personas precargadas en la base de datos», el presidente del CPLT, Marcelo Drago, indicó que es una “medida totalmente desproporcionada y extraordinariamente invasiva en relación al fin que persigue, que es la identificación de personas con antecedentes delictuales”.
A pesar de aceptar que “iniciativas como éstas son aplaudibles desde la perspectiva de la seguridad», Drago precisó que «se trata de una medida totalmente desproporcionada que muestra que los fines buscados, que es identificar delincuentes, no se condicen con el levantamiento de una enorme cantidad de datos de personas que no lo son, lo que puede prestarse para abusos y hace pagar a justos por pecadores».
