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Este domingo el Presidente Sebastián Piñera anunció los detalles del proyecto que reformará el Fondo Nacional de Salud (Fonasa) con el fin de que todas las personas accedan a un mismo plan básico de salud, que no discrimine por edad, género, nivel de ingreso o condición de salud. En el acto presidencial, el Mandatario aprovechó la ocasión para enviarle un mensaje a la oposición, un mensaje de unidad en torno a estas materias. La izquierda no tardó en reaccionar y el senador Quinteros afirmó que «esta no es la reforma integral que espera la ciudadanía y que ha sido prometida por el Gobierno». Por su parte, los nueve partidos de la oposición presentaron una contrapropuesta.
El presidente de la comisión de Salud del Senado, Rabindranath Quinteros, advirtió que no está disponible para tramitar la propuesta del gobierno sobre salud, mientras no esté claro su financiamiento.
“Nada señalan las autoridades respecto del financiamiento de este proyecto de ley. No estoy disponible para avanzar en esta materia mientras ese tema no esté totalmente aclarado. Sin financiamiento, será letra muerta” afirmó.
Quinteros agregó que «esta no es la reforma integral que espera la ciudadanía y que ha sido prometida por el Gobierno. La gente quiere un sistema único que garantice a todas las personas una salud oportuna y de calidad, sin importar su condición de sexo, edad o condición económica. Para llegar a esto la propuesta del Gobierno es muy limitada».
En ese sentido, el parlamentario indicó que «el Plan Universal de Salud es lo mismo que existe hoy y lo fundamental hoy es consagrar la cobertura universal de todas las prestaciones de salud, dejando de manera excepcional aquellas que no tendrán cobertura y ello no queda establecido en este anuncio”.
«No aceptaré la privatización de nuestro sistema de salud público. La red de prestadores de salud del Fonasa son y deben seguir siendo los establecimientos públicos y el sector privado no es una la solución a los problemas de la salud pública, sino la modernización de la infraestructura, el mejoramiento de las condiciones de los funcionarios y proteger los derechos de estos y de las personas».
El senador PS agregó que «no queremos más subsidios, sino derechos en favor de las personas. Estas deben acceder a medicamentos de calidad a precios accesibles, y para quienes la ley lo disponga, de manera gratuita. Esta fue mi propuesta para que fuera incluida en el proyecto de Ley Fármacos II; en línea con las conclusiones el informe de la Fiscalía Nacional Económica, que denunció una serie de abusos en esta materia».
Por otro lado, Quinteros hizo ver que “el denominado seguro catastrófico de salud no es tal. Es otro intento de privatización y así se lo hemos hecho saber el ministro. Por ello, será completamente reformulado en el Senado. Así se lo advertimos”.
Quinteros también lamentó el nulo reconocimiento realizado por el Presidente Piñera a la labor efectuada por el Parlamento. “Materias como el Plan de Salud Universal y eliminación de las preexistencias fueron promovidas y aprobadas por la Comisión de Salud que presido y no por el Gobierno, junto a otras medidas, como el precio único y el fin de la declaración de salud”.
Con todo, el parlamentario valoró la existencia de garantías asociadas a los problemas de salud. “Esto va en la línea correcta y estoy disponible para apoyarlo. Las personas necesitan certezas de oportunidad, calidad y financiamiento en salud”
«Digno, de calidad, solidario, eficiente, sustentable», así se define la contrapropuesta presentada por la oposición, firmada por los nueve partidos que la componen, y que se titula «Propuestas urgentes para un nuevo sistema de salud».
A través de un comunicado, los partidos de la izquierda señalan que hace cuatro décadas el sistema de salud está agonizando, «en una sociedad que protege el lucro por sobre los Derechos Humanos».
«Muchas y muchos han llamado a reformas profundas para acabar con los abusos de las Isapre, los tiempos de espera excesivos en el sector público, y la deshumanización generalizada de la salud. Hoy día la fuerza social exige y hace posibles las reformas que se requieren», añaden.
Desde el mundo social, compuesto por usuarios organizados, gremios y colegios profesionales de la salud, se ha levantado una agenda con el fin de superar la crisis sanitaria, que incluye: establecer el derecho constitucional a la salud; mancomunar los recursos de la seguridad social en un administrador único, transformando a las Isapre en seguros complementarios; aumentar el gasto público en salud a un 6% del PIB; y aumentar el per cápita basal de la Atención Primaria a 10.000 pesos.
«En apoyo a estas, y las demandas históricas para la salud en Chile, ponemos a disposición nuestros esfuerzos para avanzar en estos ejes que a nuestro parecer permitirán transformar la salud en un derecho», concluyen.
Revisa la propuesta completa a continuación.
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