Publicidad
Reconocido arquitecto británico afirma que el arte es una nueva religión y los museos, sus catedrales CULTURA

Reconocido arquitecto británico afirma que el arte es una nueva religión y los museos, sus catedrales

Norman Foster opinó hoy que el arte se ha convertido en una especie de «nueva religión» en los tiempos actuales y que los museos son sus «catedrales» o «nuevos templos de fe».


Foster sustentó esta afirmación en la «extraordinaria explosión» de visitantes que han experimentado en los últimos tiempos los museos más importantes del mundo, con entre 2,5 y más de 8 millones de visitantes al año.

«Esta explosión de visitantes ha creado un nuevo fenómeno, una nueva religión, si me lo permiten, y hemos creado unos nuevos templos o centro de fe, que son los museos y, si antiguamente las catedrales albergaban las obras de arte religioso, yo tengo la sensación de que hoy, los museos, se han convertido en los nuevos templos de fe», señaló.

El reconocido y premiado arquitecto británico, participó hoy, con una ponencia titulada «Arte y Espacio», en la primera jornada del curso de verano del Museo de Bellas Artes de Bilbao (norte de España) titulado «Museografías. Modos de ver el arte».

Foster, férreo defensor de la relación entre el arte y la arquitectura, subrayó que es «imposible» separar ambos mundos y dio a conocer en su disertación las intervenciones arquitectónicas que ha dirigido en distintos museos y espacios de arte, tanto públicos como privados, a fin de ampliar o mejorar sus instalaciones y la experiencia de sus visitantes.

Norman Foster indicó que, como arquitecto y defensor a ultranza del arte, que posee una gran colección personal de obras de los mejores artistas tanto contemporáneos como clásicos repartida entre su Fundación en Madrid y sus distintos domicilios particulares en varias ciudades del mundo, intenta «disolver las fronteras entre arte y la arquitectura, el diseño y los cuadros».

«Para mí -agregó-, todos estos elementos forman parte de la misma historia visual».

El Premio Pritzker 1999 y Premio Príncipe de Asturias de las Artes 2009 admitió que «lo más radical» que ha hecho en sus intervenciones arquitectónicas para espacios artísticos ha sido «explorar la idea de una galería de arte sin paredes fijas, lo que daría una gran flexibilidad para poder cambiar las obras».

Foster ha sido autor, entre otras obras, de la mejora de las instalaciones del Museo Británico, para lo cual buceó en los planos del proyecto original y observó que en su trasera había existido un patio que había sido utilizado como zona de almacenamiento de objetos viejos, que él vació y utilizó para crear allí la Biblioteca central del Museo.

Y la dotó de personalidad propia a través de una gran burbuja transparente que creó un luminoso espacio de encuentro. «Ahora esa zona es como un gran foro romano destinado a distintas actividades y como distribuidor del público entre las distintas galerías del British Museum», añadió.

Foster afirmó que, así como la arquitectura tiene un papel funcional, además de estético, las obras de arte «pueden tener también un papel funcional y visible» y puso como ejemplo la obra de arte que realizó la escultora española Cristina Iglesias para la nueva sede de una de las corporaciones en la City londinense.

El reconocido arquitecto mantuvo que, «si uno quiere integrar arte y arquitectura en una construcción, ha de hacerlo desde el inicio de su diseño y no ‘a posteriori’, como una especie de pegote o una solución cosmética que se añade después. Hay que concebirlo desde el inicio del proceso creativo».

Publicidad

Tendencias