BRAGA
Crédito: Agencia Uno
La familia de la joven se enteró el pasado 19 de octubre que el cuerpo que habían encontrado descuartizado en el puente El Libertador, pertenecía a María José Zambra, madre de dos hijos menores de edad, a quienes fue a dejar al colegio el 29 de agosto por la mañana. Desde ahí su paradero fue desconocido, hasta que unos niños encontraron sus restos. Por el momento, no hay ninguna pista sobre el o los implicados en el asesinato.
Mañana martes se cumple exactamente un mes desde que apareció descuartizado el cuerpo de María José Zambra, una joven madre de dos hijos pequeños desaparecida en agosto en La Serena.
La mujer estuvo desaparecida por 50 días, hasta que fue encontrada sin vida en Las Compañías, en uno de los casos más complejos que ha enfrentado la Región de Coquimbo, porque aún no se sabe nada del responsable.
Esta jornada, la familia de la joven sostendría una nueva reunión con los detectives de la Brigada de Homicidios de Policía de Investigaciones, encargados de llevar las pesquisas.
La familia de la joven manifestó que este encuentro podría servir para conocer algún avance concreto de la investigación, manteniendo la esperanza de encontrar la justicia que están buscando hace meses, informó el diario El Día.
El 29 de agosto María Zambra (30) realizaba su vida normal. Como todos los días, fue a dejar a sus dos hijos de siete y 11 años al colegio, pero nunca más volvió a su casa.
Sus restos fueron hallados el pasado 19 de octubre en bolsas de plástico por unos niños que andaban por el sector del puente El Libertador, y venían de jugar un partido de fútbol en las canchas cercanas. Después de realizar los peritajes pertinentes se determinó que se trataba de la mujer que llevaba más de un mes desaparecida.
Sus familiares la describieron como una persona seria y reservada, alguien que hablaba poco y no tenía problemas con nadie, sólo se dedicaba a su casa y a sus hijos.
Hasta el momento no hay ningún sospechoso del crimen, según informaciones entregadas por cercanos a la víctima. Durante los primeros días, las labores de investigación se orientaron a acotar el universo de sospechosos, ante los nulos indicios en las pericias realizadas al cuerpo que permitan tener a un sospechoso claro.
Dada las circunstancias en las que ocurrieron los hechos, el fiscal regional Adrián Vega destinó para la investigación una dotación de funcionarios dedicados preferentemente al caso, quienes junto a la fiscal Fabiola Celis tienen la tarea de esclarecer la responsabilidad de los hechos.
Desde la Fiscalía manifestaron al mismo medio que se está investigando, pero que aún no han tenido avances significativos, por lo que el caso estaría lejos de resolverse.
