Sustentabilidad
El uso indiscriminado de plástico se ha transformado en un desafío medioambiental, por lo que se hace necesario tener conciencia de lo que significa dar un nuevo uso a las botellas plásticas.
Botar a la basura una botella de plástico ya no tiene sentido. El PET es un material 100% reciclable y cada vez hay más empresas que, gracias a la reutilización, ecodiseño o reciclaje, se preocupan de evitar que se transforme en un residuo y sea parte de una economía circular.
En Chile, se consumen aproximadamente 990.000 toneladas de plástico al año, de las cuales se reciclan 83.679 toneladas (8,5%). Es fundamental entender que cada botella tiene valor y puede tener una segunda o una tercera vida, más allá de su uso inicial. Cada envase al ser reciclado, puede dar vida a un nuevo envase o transformarse en materia prima útil en infinidad de aplicaciones.
Franz Kramer, gerente comercial de Enfaena, señala que el PET es un material noble, fácil de moldear y tremendamente amigable que, una vez reciclado, permite fabricar productos como nuevas botellas, clamshell o zunchos.
“El PET es uno de los materiales plásticos con las mejores características para ser reciclado que se han diseñado en el mundo de envases y embalajes. Es un polímero fácil de recuperar y reciclar, su capacidad técnica hace que se pueda reutilizar innumerables veces ya que sus cadenas moleculares se mantienen y no se degradan con tanta facilidad como los polietilenos o los polipropilenos”
A principios de 2018, Coca-Cola anunció la iniciativa llamada Un Mundo sin Residuos, que incluye el ambicioso objetivo de recolectar y reciclar el equivalente de cada botella o lata que la empresa vende a nivel mundial para 2030. “Si queremos lograr nuestro objetivo debemos trabajar en conjunto con la ciudadanía, sociedad civil, empresas y autoridades. La educación ambiental es clave en esta cruzada, por ejemplo, antes de llevar los residuos a un Punto Limpio, una persona necesita conocer la reciclabilidad de los diferentes materiales. En nuestro caso, todas las botellas de nuestro portafolio, son 100% reciclables”, explica Paola Calorio, directora de Comunicaciones, Asuntos Públicos y Sustentabilidad de Coca-Cola Chile y Bolivia.
Para lograr algún cambio, es fundamental transformar la industria de los recursos. Lo que “La Nueva Economía de los Plásticos” propone es un rediseño en los envases que incluya más innovación.
El Polietileno Tereftalato (PET) es el plástico de las botellas de aguas y bebidas y es un plástico 100% reciclable. Es ligero, barato y se identifica por su sello distintivo que indica el número “1” ubicado en la base de cada envase.
En ese sentido, es importante destacar que todas las botellas plásticas del portafolio de Coca-Cola están fabricadas en este material, lo que garantiza su reciclabilidad. De hecho, se acaba de lanzar un sello de “Envase 100% reciclable” en las etiquetas de Agua Benedictino y la idea es que este símbolo se vaya incorporando paulatinamente en el resto de las marcas de la compañía.
Adicionalmente, se ha realizado una importante inversión en ecodiseño por parte de la Compañía, lo que ha permitido que las botellas PET puedan ser fabricadas con menos cantidad de plástico, como es el caso de las botellas Eco-Flex de Agua Mineral Vital y de los néctares Andina del Valle, las cuales tienen un 40% menos de plástico.
