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RD en tensión: el complejo momento que vive el partido ancla del Frente Amplio PAÍS

RD en tensión: el complejo momento que vive el partido ancla del Frente Amplio

Macarena Segovia
Por : Macarena Segovia Periodista El Mostrador
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El denominado caso Fech ha traído consigo más que una tensión puntual entre Revolución Democrática y Movimiento Autonomista. La posición de bajarle el perfil por parte de RD no ha caído bien en la interna del partido, principalmente en su frente estudiantil, lo que ha llevado a la renuncia a su militancia del vicepresidente de la Feusach, Cristopher Cornejo. Desde otros espacios de la colectividad llaman a salir del ombliguismo estudiantil y dejar la discusión al interior de la tienda.


La posición pública que tomó Revolución Democrática (RD) ante la suspensión del presidente de la Fech y militante de Movimiento Autonomista, Alfonso Mohor, sancionado por encubrir un caso de abuso laboral, no cayó bien al interior del frente estudiantil de dicho partido.

Las críticas a la forma en que se respondió a la arremetida del Movimiento Autonomista –que acusó que la suspensión de Mohor se debía a una jugada política de RD–, no tardaron en llegar y trajeron consigo la intensificación de los complejos equilibrios que se mueven en la interna del partido del diputado Giorgio Jackson.

Un descontento que quedó en evidencia en un intercambio de correos al interior de la colectividad en el que se explicitó que “lamentablemente hay quienes en RD les ha costado también escuchar más a nuestra base, escuchando solo el relato instaurado por el MA”.

La carta enviada desde la base RD de la Universidad de Chile reconoce que es necesario realizar una autocrítica, pero que se encuentran “dolidos” ante la reacción pública de su partido. “La defensa mediática a Mohor ha relativizado los hechos, pero para nosotras y nosotros, venga de donde venga es inaceptable que un Centro de Estudiantes le ponga calificaciones a una funcionaria por su trabajo, que un Centro de Estudiantes evalúe mal a la funcionaria para desvincularla”, recalca el texto.

A pesar de esto, los estudiantes reconocen que “el proceso de investigación posterior fue muy deficiente y es todo el pleno (Fech), todas las fuerzas políticas, quienes tienen responsabilidad en aquello”.

Respecto a la respuesta que dio el Movimiento Autonomista, se recalca el hecho de que el tema central, que es “la dignidad de una trabajadora”, fue relegado “para hacerlo parecer una máquina política, sacando de la discusión de lo central y llevándola a una rencilla entre RD y MA, lo que nunca fue visto de esa manera desde RD-UChile. Lo que el MA hizo fue una defensa corporativa de uno de sus dirigentes (que, además, estaba medio desaparecido en la vida política por la movilización feminista) y esta defensa vuelve a vulnerar la dignidad de una trabajadora: no hay nada más revictimizante que la impunidad”.

[cita tipo=»destaque»]Padilla señaló que su mayor crítica a las dos orgánicas es la centralidad que se le ha dado a un conflicto que se desarrolla en un espacio importante, pero específico. “Me asombra ver cómo un conflicto, por más que sea la Universidad de Chile, escala a nivel nacional. En esto hemos fallado todos los involucrados. Todos pusimos las cosas en la perspectiva incorrecta”, sentenció.[/cita]

La misiva también apunta a la necesidad de refundar y fortalecer la Fech:“Este proceso tan difícil, sobre todo para nuestras dirigentes estudiantiles, no ha contado con el apoyo debido de parte de la bancada parlamentaria y parte de las tendencias internas (de RD)”.

En esa línea, en el documento se hace un emplazamiento claro a la colectividad: “Está bien que seamos los maduros y estemos por encima del conflicto, pero esto no quiere decir que dejemos que nos pisoteen, que nos pasen por encima, y más aún, que salgamos hacia afuera dándole más razón a una orgánica distinta que a nuestras/os propias/os compañeras/os, más aún si no los hemos escuchado primero. Nunca hicimos un maquineo político, lo que buscábamos era defender una convicción: respetar la dignidad de las trabajadoras de nuestra universidad”.

Este descontento interno se tradujo en una baja dirigencial del movimiento estudiantil. Este fin de semana, Cristopher Cornejo, vicepresidente de la Feusach, renunció a Revolución Democrática, decisión que el estudiante de Administración Pública explicó en su carta de renuncia, donde recalcó que el partido nunca lo ha apoyado, “aun cuando en un par de ocasiones manifesté explícitamente que requería apoyo en cosas puntuales y mínimas. La política se hace de manera colectiva, pero en la Feusach me ha tocado trabajar solo y sin apoyo del partido cada día de estos siete meses en los que he sido vicepresidente de la Feusach”.

Agrega que “una de las gotas que rebalsó el vaso” fue el caso de la Fech y “la nula comunicación que estableció la directiva” del Frente Estudiantil de RD y la Directiva Nacional.

El dirigente estudiantil puso el foco en un punto que ha sido bastante criticado por el mundo más social de RD: el segundo plano que ha tomado el trabajo territorial frente al que realizan los dirigentes más políticos. “Creo que la dinámica de relación que se ha establecido con las dirigencias sociales, durante la totalidad del periodo que me ha tocado ejercer, expresa una forma de ver la política que no tiene nada que ver con lo que a mí me motiva”, señaló.

Mirándose el ombligo

La respuesta desde todas las dirigencias políticas de RD ha sido cerrar filas y dejar que la problemática se zanje puertas adentro en la colectividad. “Hay que cerrar fila como partido, lo que no significa que no haya críticas, yo he sido bien duro, pero este es un momento en donde hay que dar la discusión hacia adentro”, destacó Pablo Padilla, consejero de Revolución Democrática.

La bancada llegó al consenso de instalar la bajada de que se trata de un problema menor, pese a que se había marginado de la discusión tras su estallido. “La fricción entre RD y MA es una pulga en un elefante”, declaró el diputado de RD, Jorge Brito, en El Mercurio de Valparaíso.

Posición que surge justo después de las polémicas declaraciones del alcalde de Valparaíso, Jorge Sharp, quien afirmó que el caso Fech marcaba un “antes y un después” entre las relaciones de Movimiento Autonomista con Revolución Democrática, palabras que no cayeron bien al interior de las dirigencias de RD.

Durante la última semana se ha mantenido una fuerte negociación entre ambos movimientos. Así, el viernes pasado se dieron luces de algunos avances y en las entrevistas del fin de semana cada uno marcó su posición. Las palabras de Sharp se habrían salido del margen acordado, lo que causó molestias en el partido de las banderas verdes.

Padilla señaló que su mayor crítica a las dos orgánicas es la centralidad que se le ha dado a un conflicto que se desarrolla en un espacio importante, pero específico. “Me asombra ver cómo un conflicto, por más que sea la Universidad de Chile, escala a nivel nacional. En esto hemos fallado todos los involucrados. Todos pusimos las cosas en la perspectiva incorrecta”, sentenció.

El consejero de RD agregó que estos “son síntomas de algo que no hemos podido solucionar, que no se puede dejar pasar, estas cosas dejan de lado tantas iniciativas importantes (…). Es importante que dejemos de mirar el ombligo de la Casa de Bello, hay un mundo que está creciendo y nos estamos quedando atrás. Eso debiera ser el punto”.

Finalmente, puso énfasis en que es importante apuntar al fondo del caso: “El acoso laboral es un problema grande, que debería ser parte de cualquier agenda transformadora, no corresponde postergar el tema laboral en perspectiva del conflicto de las orgánicas (…). Esos son los problemas de mirarse el ombligo”.

El flanco externo

El denominado caso Fech dejó en un mal pie a Revolución Democrática, pero también abrió un flanco para el conglomerado justo en la misma semana en que perdieron la acusación constitucional contra el ministro de Salud, Emilio Santelices.

La centralidad de las críticas apuntan a que el Frente Amplio se ha perdido en medio de la discusión de la pequeña política, dejando pasar temas relevantes como la nacionalización del litio y el caso de SQM. La diputada de Izquierda Autónoma, Camila Rojas, destacó –en el programa ‘Cariño Malo’– que el proyecto político del FA «no ha estado tan presente”.

Una de las principales críticas ha apuntado a la direccionalidad que le ha dado RD a la extrema parlamentarización que ha tenido la política del Frente Amplio. La vocera de Partido Poder, Karina Oliva, enfatizó que «es importante que la mesa nacional y la bancada tengan presente que, si se llega a parlamentarizar, es muy probable que se levanten feudos. Y levantar feudos hoy en día es una política para retroceder veinte años y desgastar al FA hacia una política que no va a lograr ser gobierno”.

La dirigenta de Poder agregó que como partido siempre “hemos tenido una forma de hacer política distinta a la de Revolución Democrática”, lo que genera distancias con la posición que han tenido ambas fuerzas a la hora de definirse ante la política de alianzas.

“Ellos vienen de un origen muy distinto, directamente del movimiento estudiantil, de la Universidad Católica, con liderazgos muy marcados y visibles desde Giorgio en adelante, Maite Orsini es un referente de RD que es muy conocido públicamente y también de sectores cercanos, vinculados a la administración de Michelle Bachelet. Tenemos un sinfín de diferencias que, para nosotros, tiene que ver con la forma de política que ellos hacen. Por otra parte, nosotros venimos sin ningún referente público conocido, sin estar nada cerca de lo que fue la Concertación y la Nueva Mayoría y eso nos hace relacionarnos con fuerzas externas de forma distinta”, destacó Oliva.

Desde la mesa nacional del FA señalaron que con la bancada de Revolución Democrática ha habido algunas diferencias. “Falta marcar posiciones más claras y no abusar de la abstención a la hora de votar en la Sala de la Cámara”, apuntó el presidente del Partido Humanista, Octavio González.

Explicó que este abstencionismo “no es solo una votación, sino que es en general. Yo critico la abstención, uno tiene que estar a favor o en contra, por ejemplo, ante el TLC de Canadá. El programa del Frente Amplio deja claro que no apoyaremos ningún TLC nuevo, en este caso fue lo conversado, discutido y analizado, la mesa del FA se manifestó en contra del tratado con Canadá y el de Uruguay, pero RD no respaldó esa decisión”.

Al respecto, el diputado Pablo Vidal planteó que “es importante aclarar que hasta el momento en Sala no se ha votado ningún proyecto nuevo de TLC. Lo único que se ha evaluado han sido modificaciones a tratados de libre comercio existentes, y nosotros, como RD, estamos comprometidos a que no se firmen nuevos TLC sin una participación ciudadana como corresponde”.

Pero agregó que “también creemos que, si hay modificaciones que pudieran mejorar las condiciones para Chile, deben ser evaluadas caso a caso, que es lo que hemos hecho, y hemos conversado con Chile Mejor Sin TLC y no hay ningún conflicto al respecto. Todo esto está conversado y aclarado a nivel de Frente Amplio”, sostuvo.

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