A pesar de las iniciativas para ayudar tras la catástrofe, se comprobó que la respuesta de Parada, jefe de Operaciones Terrestres y Aéreas de la Corporación Nacional Forestal, fue que «técnicamente esos aviones no sirven para Chile, es desperdiciar dinero en nuestro país en algo que no se va a utilizar».
El ofrecimiento de Lucy Ana Avilés por el Supertanker todavía está en el debate público, esta vez a través de una serie de e-mails y mensajes de WhatsApp que revelan negativas y demoras de funcionarios estatales y de la Conaf.
El 21 de enero se llevó a cabo el primer contacto de Magdalena Moreno, directora de la Fundación Viento Sur, con Fernando Parada, jefe de Operaciones Terrestres y Aéreas de la Corporación Nacional Forestal, a través de mensajes, según informa El Mercurio.
A pesar de las iniciativas para ayudar tras la catástrofe, se comprobó que la respuesta de Parada fue que «técnicamente esos aviones no sirven para Chile, es desperdiciar dinero en nuestro país en algo que no se va a utilizar».
Moreno le insistió que el Supertanker funciona en todas partes, pero Parada le respondió: «Es un avión grande que necesita una pista con resistencia necesaria para soportar el peso. Tiene maniobrabilidad limitada y no puede ingresar en quebradas».
