Este jueves se conoció el veredicto en donde se condenó a Víctor Lizarraga por sobornar a entre 2007 y 2009 un ex asistente del agregado de Defensa de la Embajada de Corea para beneficiar a la empresa Serlog, involucrada en la compra y venta de armamento.
El tercer tribunal oral en lo penal de Santiago condenara por delito de cohecho a Víctor Lizarraga, funcionario de la empresa Serlog (Servicios Logísticos Ltda.), empresa que se dedicaba a la intermediación de armas y provisiones para las Fuerzas Armadas Chilenas, la cual fue de propiedad del empresario Guillermo Ibieta Otto, quien falleció durante la investigación y estuvo preso por los delitos de cohecho y lavado de dinero bajo este caso.
En esta empresa el acusado Víctor Lizárraga Arias, desde el año 1999 desempeñó funciones como Director de Proyectos, estando a su cargo la relación de la empresa con el Ejército de Chile atendida su calidad de General (R), teniendo la representación de dicha Sociedad ante el Ejército y contando con poderes bancarios suficientes para firmar documentos y cheques en representación de la empresa.
Con el fin de incentivar a Jong Pak Lee -quien trabajó en la Embajada de Corea como asesor del Agregado del Ministerio de Defensa el año 2001, y sus labores consistían entre otras en promover y ejecutar proyectos de las Fuerzas Armadas de Chile con empresas Coreanas- en el desempeño de las funciones propias para que, por una parte facilitara la obtención de representaciones de empresas coreanas por parte de Serlog y por otra, que facilitara la concreción de negocios específicos, a partir del día 29 de junio del año 2005, Ibieta y Lizárraga, le pagaron mensualmente la suma de $600.000., mediante giros de cheques que eran pagados cada mes por la empresa Serlog en la que ambos tenían facultades para girar cheques, los que se giraban a nombre de la abogada Francesca Botto Villablanca, cónyuge de Pak Lee, quienes para justificar la operación entregaban boletas por una supuesta prestación de servicios profesionales como abogada a Serlog, por servicios que en realidad no se prestaban. Estos pagos se mantuvieron hasta el día 04 de agosto del año 2009, totalizando la suma de $29.400.000.
De esta manera Guillermo Ibieta y el acusado Víctor Lizárraga pagaron un soborno, a través de la empresa SERLOG, al funcionario público coreano Jong Pak Lee, a cambio de que éste instara, en el desempeño de sus funciones, por la concreción de un negocio entre la empresa Hanwa y el Ejército de Chile, donde SERLOG recibió una comisión de aproximadamente 160 mil dólares.
El fiscal persecutor Pablo Norambuena, quien estuvo en audiencia junto al fiscal José Antonio Villalobos, al ser consultado por El Mostrador, se mostró conforme con el resultado de la indagatoria y la decisión del tribunal. “La fiscalía está conforme con el veredicto condenatorio, por graves delitos de soborno a funcionario público internacional, ya que el tribunal considero que las interceptaciones telefónicas se hicieron en conformidad a la constitución y las leyes y se sanciona la corrupción en el ámbito de la contratación internacional. Es relevante que las conductas penales se reflejen en una condena. Esto marca un precedente, es una experiencia positiva para la fiscalía que estos hechos resulten en una condena y este es el primer caso”.
