Por el precio del bioequivalente de marca, un consumidor podría comprar casi 15 cajas del medicamento genérico más barato, advierte el organismo.
El Servicio Nacional del Consumidor (Sernac) realizó un estudio que detectó importantes variaciones de precio entre los llamados medicamentos «pares bioequivalentes».
La investigación que fue entregada en la Fiscalía Nacional Económica (FNE) se realizó en enero y tomó en cuenta aquellos remedios que estando registrados por un mismo laboratorio, destinados a igual tratamiento, con dosis y compromidos símiles, se venden a distinto valor dependiendo de su presentación: con nombre genérico o marca de fantasía.
Tal como lo consigna La Tercera, por el precio del bioequivalente de marca, un consumidor podría comprar casi 15 cajas del medicamento genérico más barato.
Por ejemplo, el remedio para tratar úlceras gástricas, cuyo principio activo es Omeprazol. Laboratorio Chile S.A ofrece dos presentaciones -en cápsulas de 20 mg y 30 comprimidos- una con el nombre genérico, Omeprazol, a $850, y la otra, con la marca Zomepral, a $12.590. Es decir, una diferencia de $11.740 o del 1.381 por ciento.
Al respecto, el director de Sernac, Ernesto Muñoz, sostuvo: “Detectamos diferencias sustanciales de precio entre bioequivalentes genéricos y de marca, destinados al mismo tratamiento, con el mismo principio activo, la misma dosis y número de comprimidos, que cuentan con estudio de bioequivalencia y están registrados bajo un mismo laboratorio”.
“Le estamos avisando a la gente que prefiera el bioequivalente más barato y no se confunda con el bioequivalente de marca, que debería tener los mismo efectos que el más barato”, agregó.
«Esto es prioritario para nosotros porque tenemos altas asimetrías y la FNE nos ha dicho que hay brechas en cuanto a la estructura del mercado, que pueden ir no sólo contra la libre competencia, sino tambien contra los consumidores, y donde nos ha costado mucho modificar prácticas contrarias a éstos, como la información de precios”, acotó Muñoz.
“Buscamos transparentar el mercado y por eso ponemos en conocimiento a la Fiscalía Económica. Ellos están mirando desde el punto de vista de la libre competencia y si permite o no el desempeño de un mercado eficiente”, concluyó.
Según explicó la directora (s) del Instituto de Salud Pública, Pamela Milla, no hay impedimento para que un laboratorio tenga dos remedios bioequivalentes de igual principio activo y fórmula, con distintos precios pues, se trata de una estrategia comercial.
“Puede que el contenido sea exactamente el mismo, pero si tu empacas distinto o pones otra caja, vas a hacer un producto diferente y nosotros no lo podemos tipificar como que es el mismo, porque legalmente ya es otro producto”, declaró.
Por su parte, el ministro (s), Jaime Burrows, afirmó que “podrían haber herramientas legales, y el mecanismo para hacer el siguiente paso es que la Físcalia Nacional Económica tome estos elementos y se haga un juicio respecto de si hay prácticas contra la libre competencia”.
