El martes de la semana pasada llegó hasta el Congreso, en Valparaíso, una funcionaria de la Presidencia quien, tras contactarse telefónicamente con los legisladores, se fue reuniendo con ellos para que respondieran el documento de una carilla y media. Los encuestados estiman que esto es una reacción a las críticas que ha sufrido la actual administración de parte de dirigentes de la centroderecha.
Las múltiples críticas de autoridades y parlamentarios de la Alianza a la escasa coordinación entre el gobierno y los partidos parecen haber caído en tierra fértil, pues se estaría pretendiendo superar, desde La Moneda, al más puro estilo Fundación Futuro. Desde hace un par de semanas que la Presidencia comenzó a contactar a los legisladores oficialistas para solicitarles que respondan una encuesta que servirá, se les dijo, de guía al Presidente de la República, Sebastián Piñera, para conocer los intereses de los legisladores gobiernistas y lograr una mejor relación entre el Ejecutivo y el Legislativo. Pero también para tener “una mejor sintonía” con lo que piensa la gente, aprovechando la cercanía de los diputados con los votantes.
Algunos de los legisladores encuestados estiman que este proceso “sin duda es una reacción a las críticas que se le han hecho al gobierno, en cuanto a que no estaría tomando en cuenta a los partidos en la toma de decisiones”. De hecho, no son pocos los parlamentarios que se lamentan de que las autoridades, incluida “la mayoría de los ministros” se sienten más inclinados a buscar fórmulas que les permitan tener un mayor entendimiento con la Concertación, en desmedro del oficialismo. Ello, porque “asumen que a nosotros no tienen que convencernos de apoyar los proyectos del Ejecutivo”, plantea un diputado de la UDI que ya respondió el sondeo.
Para facilitarle el proceso a los parlamentarios, el martes llegó hasta el Congreso en Valparaíso, la funcionaria Constanza Gilmore, con la encuesta bajo el brazo. Y logró que varios de los diputados la respondieran en el momento.
La idea fue bien recibida por la mayoría de los legisladores, algunos de los cuales explicaron que el sondeo tiene por objeto que el jefe de Estado pueda conocer las necesidades de los diferentes distritos, de quienes directamente están en terreno. Sin ir más lejos, para un diputado de RN este es un buen mecanismo para que el Presidente tenga “sintonía con las reales necesidades de la gente”, cosa que según los más críticos del sector, el gobierno “parecía haber perdido” en estos primeros meses de la administración.
[cita]El martes pasado llegó hasta el Congreso en Valparaíso, la funcionaria Constanza Gilmore, con la encuesta bajo el brazo. Y logró que varios de los diputados la respondieran en el momento.[/cita]
Algunos de los tópicos que aborda el sondeo, que se solicitó fuera respondido con la mayor “franqueza posible”, dicen relación con los proyectos emblemáticos de cada diputado; los principales desafíos que presenta cada comuna del distrito; evaluación de la gestión presidencial; evaluación de las diferentes áreas ministeriales, que algunos leyeron como evaluación de los titulares de las mismas; también se les pide que mencionen sus peticiones al Ejecutivo; y, evaluación del proceso de coordinación entre el gobierno y los parlamentarios, entre otros temas. Todo en poco más de una carilla, que según algunos de los consultados apunta a mejorar la relación con el Ejecutivo que hasta ahora “no había sido del todo fluida”. Como dato adicional, un legislador señaló que se les aseguró que la encuesta “la vería sólo el Presidente y que es para su uso exclusivo. Pero yo creo que también se la van a pasar a los ministros”.
Este tema no es menor, dado que no faltan los parlamentarios que hicieron una relación entre la evaluación de las distintas áreas y el eventual cambio de gabinete. Un diputado indicó derechamente que con el sondeo “la percepción que uno tiene es que se nos está consultando por el desempeño de los ministros”. Ello porque, según su impresión, las preguntas del sondeo, “entre ocho y diez, están elaboradas desde un punto de vista más político que ciudadano”.
Otro legislador, que coincide con la postura de quienes estiman que el sondeo podría estar relacionado con el cambio de gabinete, también plantea que el gobierno acude a los diputados oficialistas, “porque sabe que somos los que estamos en terreno y tenemos sintonía directa con la gente. Deben sentir que, de alguna manera, se están haciendo cosas que no son las que la ciudadanía quiere o necesita. Y nosotros podemos ser el nexo para que las iniciativas estén en sintonía”.
Esta encuesta se suma al almuerzo que la semana pasada sostuvo el mandatario con los senadores de la Alianza y, posteriormente, la cena que efectuó con los diputados del sector en Cerro Castillo. Lo que es percibido como un “gesto” de Piñera de acercamiento a sus parlamentarios para terminar con las críticas provenientes desde su propio sector, que hacen “un ruido innecesario en el mejor momento del gobierno y del propio Piñera, desde que llegó a La Moneda”, concluye un legislador que festeja que se “haya comenzado a escuchar a los partidos”.
Por otro lado, no faltan los que encuentran “divertido” que el mandatario incluso encueste a los parlamentarios del sector para conocer sus necesidades, críticas, o incluso propuestas para mejorar la forma como está actuando el gobierno.
