El esfuerzo del presidente por presentar a Argentina como un lugar donde se pueden hacer negocios está a punto de ser socavado por los sindicatos de trabajadores que han llamado a una huelga nacional para el 6 de abril, amenazando con paralizar el país en el primer día completo del evento.
El esfuerzo del presidente Mauricio Macri por presentar a Argentina como un lugar donde se pueden hacer negocios está a punto de ser socavado por los sindicatos de trabajadores que han llamado a una huelga nacional para el 6 de abril, amenazando con paralizar el país en el primer día completo del Foro Económico Mundial (WEF, por sus siglas en inglés) en Buenos Aires.
La huelga de 24 horas fue convocada por la CGT, la confederación sindical más grande del país y es probable que detenga todo el transporte público. El CTA, otro grupo sindical, ha planeado su propia huelga para el 30 de marzo.
«Hay un malestar generalizado en amplias capas de la población que la CGT intenta interpretar», dijo Juan Carlos Schmid, secretario general del sindicato, en un anuncio televisado.
La huelga será la primera a nivel nacional desde que Macri asumió el poder e implementó inmediatamente reformas diseñadas para abrir la economía, provocando un salto en los precios y socavando el gasto del consumidor. El gobierno dice que las reformas están comenzando a despegar con la desaceleración de la inflación y la economía lista para salir oficialmente de la recesión cuando los resultados del Producto Interno Bruto del cuarto trimestre sean publicados la próxima semana.
Se espera que la mayoría de los líderes de la región desciendan a Buenos Aires para el foro del WEF que se fundó en 1971 y celebra una reunión anual en Davos, Suiza, así como reuniones regionales en todo el mundo.
