La banda será parte del evento este 27 de enero
“Lanza internacional” es el nombre de la nueva agrupación de los hermanos Mauricio y Francisco Durán, ex miembros de la banda penquista, Los Bunkers.
Los integrantes de “Lanza internacional”, luego de la disolución de Los Bunkers, continuaron con este nuevo proyecto musical que los tiene en la actualidad promocionando su primer disco homónimo, en el que se juega con sonidos completamente renovados y letras que hacen eco a la realidad de muchas naciones en América Latina.
Ad portas de presentarse en la Cumbre del Rock, conversamos con ellos sobre su disco, cómo ven en la actualidad y los proyectos futuros.
-¿Cómo nace la idea de la agrupación y por qué deciden llamarse «Lanza internacional» ?
-La idea de iniciar la banda parte de una serie de encuentros que tuvimos en la sala de ensayo junto a Ricardo Nájera donde pudimos experimentar, jugar un poco con los sonidos y dejarnos llevar por una de las cosas más importantes al momento de hacer música, pasarlo bien. El nombre de la banda tiene bastante que ver con eso, con el espíritu que consideramos se cuela en las canciones y al momento de tocarlas. Hay una actitud muy clara, una dirección, un objetivo y un poco de ironía también. Nos gusta el hecho de que el nombre tenga varias capas de interpretación y sentidos, pero sobre todo nos encanta como se ve escrito. Tiene una potencia homóloga al sonido de la banda.
-¿Cómo se definen el estilo de música que quieren hacer, siendo que dos de ustedes vienen de una banda con éxito probado como son “Los Bunkers”?
-Creo que existía la necesidad por parte de todos de explorar nuevas formas de trabajar, de tocar, componer y producir. Esa intención se vio reflejada en largas sesiones de improvisación sobre bases muy simples pero que nos permitió ir encontrando la sensación física exacta que queríamos provocar y sentir. Luego, todo el resto fue esculpir, tomar decisiones y brindar cierto carácter puesto que la columna vertebral y la actitud de lo que estábamos buscando ya se había trazado de manera natural, había mostrado su cara. El resultado desde luego es muy distinto a lo que hemos hecho antes y eso es lo que más disfrutamos puesto que haciendo cosas distintas a las que hiciste en el pasado, se aprende.
-¿En qué o quienes estaban pensando cuando escribieron «Mala fama»?
-En un comienzo no pensamos en nada en particular. Simplemente buscar un conjunto de palabras que tuvieran sentido con la música que las sostenía. Hay que ser fiel a lo que propone el sonido, no es poner una letra arriba a tontas y a locas. Una vez encontradas ciertas palabras claves ya nos dimos cuenta de que iba la canción. Las presiones de la vida moderna, la desconfianza y sí, también una especie de oscura visión con respecto al panorama político de nuestro país y el resto de América. No había que poseer una bola de cristal para anticipar alguna de las cosas que pasarían en Chile en torno a las elecciones. El tema en ese sentido da en el clavo.
-¿»Remar hacia atrás» es una crítica al sistema político?
-El foco de esa canción recae en todo el sistema político y su amplia gama de partidos con sus consignas, promesas y fraudes. Tiene un lado que es así, muy incisivo, para luego caer en una especie de relajo mientras todo vuela por los aires. Cuando entra el coro y dice “volar” piensas en la acepción más común de dicha palabra, pero una vez que dice “todo lo que ves” te das cuenta de que habla de una explosión. Nos gusta el contraste que existe entre ambas partes de la canción. Es poco esperanzadora, en el sentido de que pareciera que estamos condenados a repetir los mismos errores una y otra vez, pero el ritmo más fiestero termina equilibrando esa desesperanza. Nos gusta esa mezcla también. Probablemente el fin del mundo lo pasemos bailando.
-A pesar que su disco tiene poco tiempo de haber sido lanzado, ¿Cómo han sentido la recepción de su trabajo en nuestro país y en el mercado mexicano?
-Hasta ahora hemos sentido una reacción bastante buena tanto en Chile como en México. La gente que se ha dado el trabajo de escuchar el disco o ir a ver a la banda en vivo, no queda indiferente. Desde luego en Chile hay unas cuantas personas reticentes al hecho de que estemos probando cosas nuevas, quieren que uno haga lo mismo siempre, pero creo que eso no logra más que seguir convenciéndonos de que vamos por buen camino. No somos un grupo complaciente. Gozamos del desafío. De descolocar cuando es necesario.
-¿Qué esperan de las presentaciones que se les vienen, incluida la Cumbre del Rock?
-De todas las presentaciones que se nos vienen de ahora en adelante esperamos desde luego una buena recepción, estar bien preparados, sonar bien y transmitir la energía necesaria. En ese sentido, nos sentimos bastante confiados. La cumbre del rock es una muy buena plataforma, masiva y popular. Pienso que el grupo se va a desenvolver muy bien en aquel espacio. Estamos súper contentos de tener la oportunidad de compartir con tantos colegas y con trabajos tan emblemáticos. Es la única presentación que el grupo hará en Chile durante esta parte del verano así que aprovechamos de invitar a todos a formar parte de esta fiesta.
