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Terence Tao, el genio matemático: «El odio a las matemáticas proviene de la escasez de docentes bien calificados» En Congreso Futuro presentó la charla «Los códigos escondidos del universo»

Terence Tao, el genio matemático: «El odio a las matemáticas proviene de la escasez de docentes bien calificados»

El matemático australiano fue un genio precoz. A los nueve años ya asistía a asignaturas de matemáticas de nivel superior. A los 17 se licenció de matemáticas y a los 20, siendo ya doctor, se convirtió en el profesor universitario más joven de la UCLA. Aprovechando su visita en Chile, El Mostrador conversó con el científico no sobre matemáticas, sino cómo enseñar y aprender matemáticas en un país como Chile, que tiene un panorama mixto. Bien a nivel latinoamericano, pero muy por debajo del promedio de la OCDE. «Hay que volver la docencia una profesión más atractiva para aprenderla y permanecer en ella».


«Terry Tao ha soltado una bomba». Ese fue el primer tweet que el 17 de septiembre de 2015 escribió Derrick Stolee -matemático de la Universidad estatal de Iowa en Ames- para referirse a la osadía de Terence Tao. El genio matemático, que nueve años antes había ganado la medalla Fields, aseguró en un artículo del repositorio arXiv  haber demostrado una conjetura en teoría de números formulada en la década de 1930 por el célebre matemático húngaro Paul Erdös.

La discrepancia de Erdös, que era un problema matemático que llevaba 80 años resistiéndose a ser resuelto —incluidos varios intentos de resolverlo con computadora- cayó a los pies de Tao. Erdös, fallecido en 1996, conjeturó que, «para cualquier sucesión infinita formada por los números +1 y –1, siempre sería posible encontrar un conjunto finito de términos equidistantes cuya suma superase, en valor absoluto, cualquier cantidad previamente elegida, por grande que esta fuese».

Como se sostiene en le revista Scientifican American, el trabajo de Tao confirmó que Erdös estaba en lo cierto. En el artículo se explica que, en general, las sumas de términos equidistantes divergen sea cual sea la sucesión de +1 y –1 considerada, si bien no aporta un método para calcular su valor en cada caso concreto.

Genio precoz

El matemático Terence Tao (Australia, 1975) es lo más parecido a un genio precoz. Tao ya asistía a asignaturas de matemáticas de nivel universitario a la edad de nueve años. Es uno de los dos únicos niños en la historia del programa de Estudio del Talento Excepcional de Johns Hopkins que ha obtenido una puntuación de 700 o superior en la sección de matemáticas del SAT cuando solo contaba con 8 años. Tao fue el participante más joven de la historia en la Olimpiada Internacional de Matemática ,y a los 17 años recibió su graduación bachelor y master de la Universidad Flinders con Garth Gaudry y a los 20 ya había recibido su PhD

Esta eminencia matemática, es uno de los invitados estrella del Congreso Futuro, el principal encuentro de científicos y especialistas del año, que termina este domingo. Expuso el martes a las 12:00 horas en teatro San Ginés sobre «Los códigos escondidos del universo».

«Mi exposición en Chile será sobre cómo incluso la matemática básica puede usarse para medir vastas distancias en el universo, como la distancia hacia la luna o el sol u otras estrellas, aunque estas estén demasiado lejanas para ser medidas directamente por cualquiera de las tecnologías actuales», adelanta.

Matemáticas en Chile

Aprovechando su visita en Chile, El Mostrador Cultura+Ciudad, conversó con el matemático australiano, no sobre matemáticas, sino cómo enseñar matemáticas en un país como Chile, que tiene un panorama mixto. Según una encuesta del Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA) de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) de 2016, nuestro país registra resultados de punta en Latinoamérica, pero está por debajo de la OCDE.

Otra evaluación, publicada en noviembre pasado, señala que los alumnos chilenos de 15 años se encuentran bajo el nivel de los países de la OCDE en medición sobre capacidades para resolver problemáticas en equipo, aunque nuevamente superaron el promedio a nivel latinoamericano.

En mayo, otro informe PISA reveló que los estudiantes de Chile están muy por debajo de la media de la OCDE en cuanto a las competencias financieras. De hecho, dos de cada tres alumnos de 15 años tiene dificultades a la hora de interpretar una factura.

¿Por qué es importante aprender matemáticas? Tao cree que hay muchas razones.

«Las matemáticas se usan cada vez más en muchas disciplinas, desde el sistema bancario hasta los gráficos de los computados, pasando por la investigación de mercados», explica.

«Pero también pueden ayudar en varios aspectos de la vida, como decisiones financieras personas o evaluar los riesgos y beneficios de un tratamiento médico. Incluso como ejercicio físico son importantes para mantener la salud, pienso que el ejercicio mental de matemáticas puede fortalecer las capacidades mentales y la salud».

Lo fundamental, sin embargo, es que «las matemáticas, como muchas otras materias que se enseñan en la escuela, son importantes para mostrar a los niños que el mundo alrededor de nosotros puede explicarse y para hacerlo menos misterioso».

Para estimular su aprendizaje, no sólo recomienda la realización de Olimpiadas, sino también la creación de clubes liderados por estudiantes para estimular a aquellos alumnos interesados en la materia. También tener oradores invitados de distintos orígenes: la academia, un laboratorio o una industria.

Los niños y las matemáticas

Tao fue un niño prodigio. Su padre, un pediatra, que migró desde Hong Kong hacia Australia, cuenta que desde pequeño enseñaba matemáticas a otros niños. Hoy este genio cree que no debe haber un sólo método para enseñar.

«Dudo que haya un enfoque único para aprender, ya que diferentes niños parecen aprender en ambientes distintos y con distintos tipos de motivaciones», dice.

«Una cosa para lograr una gran diferencia es cuando un docente puede entusiasmar lo suficiente en un tema de forma que él o ella lo sigue experimentando fuera de la escuela», ejemplifica.

Tao, como muchos de sus amigos matemáticos, recuerda de niño haber «jugado» con números y otros objetos matemáticos, por ejemplo, duplicando un número para ver qué sucedía.

«Esta clase de juego puede parecer no llevar directamente a nada productivo, pero realmente puede profundizar el conocimiento sobre un sujeto», remata.

Además de esto, Tao cree que la tecnología puede ser un aporte en el aula.

«Creo que internet es un gran recurso, tanto para estudiantes como profesores», asegura. «Los estudiantes pueden complementar lo que aprenden en clase con materiales de referencia y videos que pueden obtener en la red, y también los maestros pueden usar internet para enriquecer sus clases y tareas», asegura.

Tao piensa que esto puede hacer una diferencia especialmente para alumnos en áreas remotas o con discapacidades.

«Tal vez, en el futuro, más y más la enseñanza será totalmente online, aunque por ahora aún es difícil reemplazar completamente la experiencia tradicional del aula».

La impopularidad de las matemáticas

Hoy muchos niños y niñas odian las matemáticas, pero Tao cree que tiene que ver con la escasez de profesores bien calificados, más que con la materia en sí. Él mismo recuerda haber disfrutado de la materia tanto dentro como fuera de la escuela, además de haber tenido buenos académicos.

Un docente mal calificado, en cambio, puede dedicarse a enseñar la materia «desde el libro» por carecer de un conocimiento profundo de la misma.

«Por ejemplo, un estudiante puede desanimarse si resuelve un problema matemático de una manera creativa -y finalmente correcta- que es marcado como equivocado sólo porque no siguió el método que prescribe el libro. Una característica importante de las matemáticas es que los problemas con frecuencia puede solucionarse de más de una forma».

En Estados Unidos efectivamente hay una falta de profesores de esta materia a nivel primario y secundario.

«Creo que una razón es que los docentes de matemática con frecuencia toman empleos mejor pagados en otras industrias. Hay que volver la docencia una profesión más atractiva para aprenderla y permanecer en ella».

Operatoria y pensamiento

Hoy existen diversos cuestionamientos a la enseñanza de la operatoria, en momentos en que cualquier puede comprar una calculadora, y algunos investigadores postulan  que sobre hay que enseñar a pensar.

Sin embargo, Tao cree que ambos son importantes. Advierte que si alguien sigue ciegamente una fórmula matemática e ingresa datos en una calculadora o un computador sin entender cómo funciona, puede terminar en un desastre.

«Por ejemplo, antes de la Gran Crisis Financiera hace una década, muchas firmas financieras importantes creían que tenían niveles adecuados de riesgo en sus derivados -como en el mercado inmobiliario- pero los cálculos matemáticos incluían presunciones ocultas que resultaban ser totalmente falsos».

«Los modelos matemáticos que usaban asumían que las tasas inmobiliarias de impago en diferentes partes del país no estaban relacionadas, por lo cual no podía haber un pico de impagos en todo el país, pero eso fue lo que efectivamente pasó», explica.

 

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