El próximo 17 de agosto inicia la exposición internacional en el Muelle Melbourne & Clark de la ciudad minera, la cual es el resultados de una exitosa convocatoria que se realizó a nivel latinoamericano. En esta ocasión, destacan las propuestas de contundencia conceptual, así como también, las que se mantienen en sintonía con el entorno en el que serán emplazadas.
Dentro de dos semanas, los artistas Carmen Paz Castañeda, Nickolas Jackson, Lucía Warck-Meister, Adriana Ciudad, Fernando Foglino, Ana Mosquera y Oscar Pabón, llegarán a plasmar sus creaciones en el transitado Muelle Melbourne & Clark, en la capital de la Segunda Región.
Sus propuestas representan, desde diferentes perspectivas, el tema curatorial de esta versión asociado con los conceptos de amor, decadencia y resistencia. Esta relación surge desde la necesidad de tensionar la idea del amor, pues según Dagmara Wyskiel directora de la actividad, éste se intentó considerar desde todos los posibles enfoques. “He hablado sobre familia, maternidad, pasión y diferentes formatos de relaciones, de cómo se rompe la estructura de dos sexos. Hay un mix que a mí me encanta, en el que se pueden observar tantos cambios radicales que podría decir que son hasta revolucionarios”.
Frente a esto, añade: “Como en cada revolución es necesario generar tensiones. Lo vemos frecuentemente en las marchas. Eso es generar tensión, para tener derecho a vivir el amor al cuerpo propio”. Asimismo, describe la decadencia como una crítica al mundo conservador. “Siempre que los sectores conservadores querían criticar y cuestionar lo nuevo que se venía, lo catalogaban como decadencia”.
Dentro de la misma línea, puntualiza que por un lado está el discurso de la decadencia y por otro el de la resistencia, los que finalmente sufren las partes conservadoras, ya que “cuando tú escuchas estos discursos entiendes que son ellos los que viven en absolutamente decadencia. Entonces se van mezclando, van conviviendo”.
La instancia contará con los trabajos realizados por siete artistas provenientes de diferentes países latinoamericanos, entre los que se encuentran Chile, Perú, Venezuela, Argentina y Uruguay. Sus creaciones, originales para el certamen, fueron seleccionadas mediante tres criterios: originalidad, coherencia y viabilidad.
Boceto de la obra Las Amazonas.
Dagmara Wyskiel, quien vive desde hace once años en Antofagasta y estudió en la Universidad de Bellas Artes de Cracovia, profundizó en lo que serán las piezas de la exhibición internacional: “Eso es lo increíble, tenemos que pensar que 287 personas bajaron la historia de la ciudad en texto, el plan arquitectónico del muelle, fotografías y videos, generaron una aproximación de lo que es SACO, de lo que es la esencia del concurso y luego, surgió esta propuesta creativa, pensada exclusivamente para este espacio”.
En relación a las obras que se presentaron, Wyskiel, enfatiza en la diversidad que se presentó a la hora de hablar sobre el amor. “Llegaron propuestas muy creativas, abordadas desde lo escondido, lo rechazado socialmente y la tecnología. Creaciones de carácter trascendental, que representan el aspecto más potente de SACO, la tremenda variedad que habla de los cambios brutales y dinámicos que actualmente vive América Latina”.
El pasado 21 de julio, se inició elcircuito expositivo titulado “Aluvión Visual”, apuesta realizada en el contexto de SACO 6. La jornada consideró la vinculación con recintos educativos e instituciones de estudios superiores, medios de comunicación y organizaciones. Además, buscó un énfasis en lo local, así como también en educar al público nortino sobre conceptos básicos del arte visual, necesarios para el crecimiento de estas localidades, muchas veces, desplazadas.
Esta actividad la protagonizaron cinco presentaciones, en las que se buscó repensar la ciudad de Antofagasta. Al mismo tiempo, destacan el valor del arte como elemento fundamental en el proceso cognitivo y en la formación de una sociedad crítica y contemporánea.
David Corvalán, autor de la serie “Polvo eres” presentada en “Aluvión Visual”, enfatiza en el importante rol del encuentro creado por el Colectivo Se Vende, dirigido por Dagmara Wyskiel y Christian Núñez. “Me dio la oportunidad de mostrar lo que hago. Me han apoyado específicamente en la difusión, un tema muy directo, pues se me dificulta dar a conocer mi trabajo estando en Calama”.
“Creo que es importante que existan estas instancias, no sólo en el norte de Chile, sino que a lo largo de todo el país, en las que se puede ser parte del arte contemporáneo. SACO, destaca y brilla porque hay carencias de espacios y de iniciativas como estas”, agregó.
Obra de David Corvalán
Corvalán, artista visual enfocado hace algún tiempo en el área de la escultura, señala que un rasgo que define su trabajo son los materiales que utiliza. “Son elementos que no son comunes, hago una investigación y busco que hablen por sí solos. Mi trabajo tiene que ver con mi contingencia, habla de mi entorno y de la Segunda Región”. A esto, añade: “Polvo eres, es una reflexión de nuestra fragilidad, de la fragilidad de los sentimientos. En mi caso es una visión un tanto oscura y existencialista respecto al amor”.
Por otro lado, el fotógrafo Gabriel Navias, quien es parte del proyecto “Ven a mi casa”, indica que “definitivamente es una oportunidad de visibilidad para los artistas desde su territorio. Creo en las instancias que existen en la región para formarse y mostrar desde lo local, de descentralizar un poco las artes e incluso nuestros pensamientos”.
“Los extremos de nuestro país tienen una gran problemática para poder formarse y eso te impide crear desde dónde eres. Esto es un lugar en el que podemos trabajar en conjunto para activar y potenciar la escena local”, dijo Navias.
La Semana de Arte Contemporáneo SACO se realiza anualmente en el norte de Chile y tiene por objetivo ser considerado como un núcleo permanente de reflexión, crítica y diálogo a través de las obras, en un sector carente de este tipo de instituciones.
En su sexta edición, logra su consolidación como vitrina de las artes visuales locales y extranjeras, dando la oportunidad de acercar el trabajo artístico, mediante el cual se busca reforzar el pensamiento crítico y la interpretación individual.
Dagmara Wyskiel, comenta sobre las diferentes opciones que existen actualmente de ampliar su trabajo, entre las que destaca la posibilidad de transformar a SACO en la primera bienal chilena. “Estamos pensando en un año enfocarnos en la visibilidad y la creación de redes a un nivel internacional, y otro, tener como centro la creación de vínculos con micro zonas u otras regiones, como Concepción y Valdivia. Son aristas que se complementan, deseamos vincularnos y mantener conexiones, pero no podemos hacer sólo un festival local, ya que no se le dará la importancia que amerita y no se tendrá el espacio de difusión y redes”.
Para terminar, señala: “Estamos conscientes que se formó una avalancha gigante. Estamos felices y hace 15 años repito que es maravilloso. Es un público al que se le ha privado información, que no tiene formación pero que viene igual, confiando en que tendrá una nueva experiencia. Es maravilloso y siempre estaremos ahí, para ver esa primera experiencia con el arte contemporáneo. SACO 7, 8 y 9, van”.
