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Proyecto de título de estudiantes de cine de la UDD pretende abrir la discusión sobre el aborto libre en Chile Es el séptimo largometraje de egreso de la escuela y será estrenado este año

Proyecto de título de estudiantes de cine de la UDD pretende abrir la discusión sobre el aborto libre en Chile

Son siete mujeres y un hombre, quienes desde hace cerca de dos años vienen trabajando en su largometraje de egreso: «7 semanas». Un trabajo que habla sobre el aborto y que ha ido avanzando al mismo tiempo que el proyecto de ley que busca despenalizarlo en el caso de tres causales. Aunque las estudiantes en su película se centran en el tema del aborto, la postura que plantean en ella está fuera de la discusión que se lleva a cabo actualmente en el parlamento. «7 semanas» es la historia de una estudiante de danza que decide abortar simplemente por el hecho de que no desea ser madre.


A mediados de marzo de este año la discusión sobre el aborto era el foco de atención. En la cámara de diputados, conformada en su mayoría por hombres, se discutían las tres causales de un proyecto de ley que afecta directamente a las mujeres y donde se decía, por ejemplo, cosas tan destempladas como que con el aborto “ya no habría más teletón”. En paralelo, un grupo de ocho estudiantes de cine, conformado por siete mujeres y un hombre, ajustaban los últimos detalles de su proyecto de título: 7 semanas. La película cuenta la historia de Camila, una estudiante de danza que decide abortar simplemente porque no quiere ser madre. El aborto libre, premisa en la que se basa el filme, es un tema que hoy está fuera de la discusión que se lleva a cabo en el Congreso y que para las realizadoras es una muestra de lo atrasados que nos encontramos en la materia.

7 semanas nació a partir de un caso real. Al menos así lo cuentan las jóvenes detrás del proyecto, quienes antes de conocer este caso jamás se habían planteado el tema del aborto. “No lo veíamos como algo cercano o que nos podía pasar a nosotros”, dice la directora Constanza Figari. Valentina Roblero, productora ejecutiva de 7 semanas, explica que en ese entonces se dieron cuenta de que era un asunto sobre el que tenían distintas miradas. “Lo vimos como una oportunidad también de hablar de algo que es sensible en el país, que es muy contingente, e inmediatamente sentimos una responsabilidad de hacerlo”, cuenta.

7 SEMANAS Camila y Simón copy

Hace un mes se liberó el primer tráiler oficial de 7 semanas, un proyecto en el que vienen trabajando desde 2014 y que se enmarca dentro de su título como estudiantes de cine en la Universidad del Desarrollo. “Siempre nos importó hacer una historia que tuviese relación con nosotras, como mujeres y como generación. Creímos que esta historia en particular tenía eso”, dice Evelyn Rivera, asistente de dirección y guionista del filme.

Gracias a la historia de esta amiga cercana que decidió abortar, los estudiantes reflexionaron por primera vez sobre el aborto. De este caso nació la premisa de la película: “Contar la historia de una mujer que no quiere ser mamá, no porque sea pobre, no porque su pareja sea un mal pololo o porque no cuente con apoyo, sino que por un instinto que nace de ella a raíz de que algo le pasa con este hijo que viene al mundo”, explica Constanza Tejo, directora de fotografía y guionista de 7 semanas.

El gran ausente en la discusión

Actualmente el proyecto de ley que busca despenalizar el aborto en casos de violación, riesgo de vida de la madre o inviabilidad del feto, se encuentra en segundo trámite constitucional en el Senado, específicamente en la comisión de salud.

7 SEMANAS Camila

La senadora Carolina Goic cuenta que desde que la iniciativa pasó al Senado, luego de haber sido aprobada en general y particular en la cámara de diputados el 17 de marzo y que se le retirara la urgencia el 22 del mismo mes, se han recibido a una serie de invitados con el objetivo de escuchar a todas las voces opinantes. Especialistas gineco-obstetras, los rectores de la Universidad de Chile y de la Pontificia Universidad Católica, profesionales de la salud y centros de estudio vinculados a la materia, entre otros.

Durante todo este tiempo, desde que el proyecto de ley ingresó al congreso el 31 de enero de 2015, hasta su discusión actual en la comisión de salud, las realizadoras de 7 semanas han estado paralelamente desarrollando la película y siendo testigos de una discusión donde se ha dicho de todo, pero donde el tema del aborto libre es el gran ausente.

El hecho de que la temática que las jóvenes tocan en su película ni siquiera sea parte de lo que hoy se discute en el parlamento, es algo que les indigna profundamente. “Hay muchas mujeres que deciden abortar porque no quieren ser madres, no están listas o no desean tener más hijos. No solamente porque están en una situación vulnerable de pobreza o violencia. Eso no es lo único que pasa y el que se ignore esto demuestra que no existe una conciencia real sobre otras situaciones de las que también debe hablarse y legislarse”, afirma la directora del filme.

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Y es que el equipo de 7 semanas es consciente de que su protagonista, Camila, puede ser vista como una privilegiada para algunos o tildada de egoísta por otros. Es precisamente lo que buscan exponer. “Nos han querido convencer muchas veces de que la mujer que decide abortar es egoísta y que no tiene derecho a decidir sobre el feto. Eso es un discurso generalizado de la clase política machista de este país y es justamente lo que queríamos poner en el tapete”, dice Roblero.

Pese a esto, el equipo trató de construir un personaje con el mayor cuidado posible. Tejo, una de las guionistas del filme, explica que se vieron limitadas a la hora de crear a su protagonista, debiendo evitar caer en estereotipos como el de la mujer que quedó embarazada luego de una noche alocada o por haberse tomado unos traguitos de más. “Nuestro objetivo es crear la mayor empatía posible”, agrega Figari.

Aunque 7 semanas no es la primera película que busca tocar el tema del aborto en el país, ya antes se habían realizado La Espera (2010), Apio Verde (2013) y el cortometraje documental Aborto (1965), esta es la película que llega en el momento más apropiado. Por lo mismo sus realizadores esperan que a más tardar en octubre sea su estreno nacional. Aun cuando actualmente el asunto no esté en agenda, para las jóvenes el aborto es contingente, salga en los medios o no. Prueba de ello son todas las mujeres que siguen abortando en condiciones precarias o que son juzgadas por ello.

 

Un equipo femenino

7 semanas es la séptima producción que sale de la escuela de cine de la Universidad del Desarrollo (UDD). Desde que en 2006 se fundó la carrera y se decidiera que cada año se realizaría un largometraje de egreso, la universidad ha ido ganando prestigio y sello de calidad en la escena audiovisual por sus producciones. Algunas con más éxito que otras, pero en general lo que sí se repite en todas las películas anteriores a 7 semanas  es que sus temáticas no rehuyen los temas sociales, es más forman parte del desafío de la escuela, situar al cine como un elemento central en la comunicación de los temas país.

Una de las diferencias del actual largomentraje con los anteriores, como La chupilca del diablo (2012) Volantín cortao (2013), La madre del cordero (2014), es que este año la promoción de egreso ha sido mayoritariamente femenina.

“Yo creo que en la escuela igual había expectativa respecto a la película que íbamos a hacer nosotras porque éramos la primera generación donde predominaba el género femenino y la primera vez en que una mujer sola estaba dirigiendo una película”, cuenta Rivera, guionista del filme y quien recuerda que cuando comenzaron en la carrera eran 18 personas, pero que llegaron solo ocho al último año. De esos ocho, siete eran mujeres.

La directora explica que no solo eso es destacable en la película, sino que prácticamente todos los altos cargos de esta son ocupados por mujeres. “Eso es algo genial, es único, es algo que no pasa casi nunca, sobre todo en Chile porque las mujeres tienen poco acceso a estos cargos de poder”, comenta, en alusión a lo develado en el reportaje de El Mostrador C+C «Poco más de 5% de mujeres acceden a cargos de poder en la industria del cine chileno».

Por su parte, la productora cuenta que el hecho de que eran un equipo casi en su totalidad femenino es algo de lo que no eran conscientes en un principio. Estaban acostumbradas a que sus trabajos fuesen dirigidos, escritos y fotografiados por mujeres. Al comenzar a mirar su entorno con un ojo más crítico y darse cuenta del universo machista en que estaban insertas, comenzaron a valorar la situación en que el destino las había puesto. “Ahí tomamos real conciencia de que estábamos haciendo una película encabezada por mujeres y que eso era algo nuevo, que era algo importante”, dice Roblero. “Nos dimos cuenta porque el entorno se dio cuenta”, agrega Figari.

Respecto al proyecto de ley que actualmente se discute en el Senado, las jóvenes son tajantes, al decir que «es un proyecto obsoleto y que debiese haber sido aprobado hace mucho tiempo atrás». Por lo mismo esperan que su película sirva de alguna manera para generar conciencia y abrir la discusión.

Roblero asegura que muchos de los que quieren votar en contra de las tres causales es porque sienten que estas dan paso a que se discuta sobre el aborto libre. “Que se enfrente pronto ese miedo y dejemos de vivir en el cinismo. Al final eso, el no tener la contabilidad de cuántos abortos se realizan, el no saber cuál es la realidad, es no querer ver el mundo en que vivimos y hacernos cargo de esto”, dice.

“Más allá de lo que uno piense, hay mujeres que están batallando contra quién sabe qué clase de monstruos y qué clase de vida, y creo que hay que tener un poco más de respeto por esas personas. Ya basta de juzgarnos tanto entre todos”, remata Tejo.

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