Segunda jornada del Festival de Cine de Lebu, el certamen más importante de América Latina
La velada de anoche contó con la presencia del secretario ejecutivo del Consejo del Arte y la Industria Audiovisual, el cineasta santiaguino Martín Rodríguez Castillo, quien en su discurso valoró la importancia de este festival, como uno de los más relevantes y el de mayor resonancia internacional, entre las numerosas muestras de la especialidad, que se desarrollan en Chile. El público, en tanto, vibró al lado del agua quieta y bajo las poderosas estrellas, con la película de la directora mexicana Patricia Riggen.
Siete kilómetros al sur de Cañete, provincia de Arauco, Octava Región.
El frío y el viento intentaron alejar, arredrar a la gente, pero no lo consiguen. El cielo, en cambio, estrellado y traslúcido, invitaba a soñar con la magia que emana desde una pantalla grande.
Primero, las presentaciones: Martín Rodríguez, máxima autoridad del CAIA (Consejo del Arte y la Industria Audiovisual), y representante en la ocasión del ministro de las Culturas, Ernesto Ottone Ramírez, precisó la gravitancia de Ficil Biobío, en la escena y en el circuito de los festivales locales: “Esta instancia se ha transformado en una de las muestras cinematográficas más importantes de Chile, y en la muestra fílmica que tiene una mayor presencia en el extranjero, con sedes en Cuba y en España. Y esto amenaza con seguir creciendo: tienen todo nuestro apoyo, ahora y siempre”, dijo. Le correspondieron su entusiasta adhesión, con un sonoro aplauso.
Lo escucharon atentos el público presente (lugareños y campesinos de la zona), y destacados actores locales como Luis Alarcón (cada dos segundos aparecía alguien a pedirle que se sacara una foto en su compañía), Alejandro Trejo (con él se repetía idéntica situación), y Teresita Reyes (era la noche de su cumpleaños, y la gente la aplaudió a rabiar para celebrarla: hasta un viva Chile y un grande Teresita, retumbaron al interior de la reverberante oscuridad).
Comenzaron las secuencias: el hermoso travelling aéreo que da inicio a la cinta de la mexicana Patricia Riggen (la creación de un submundo en las entrañas de la mina San José, dentro del universo sensorial es notable); y empezaron a esfumarse las escenas protagonizadas por Antonio Banderas, Juliette Binoche, el brasileño Rodrigo Santoro, y la célebre por estos Kate del Castillo, a causa de sus vínculos y entrevistas con el narco azteca Joaquín Guzmán Loera, alias “El Chapo”.
El cine en compañía del lago Lanalhue se repite esta noche, con la festejada El club, del realizador chileno Pablo Larraín Matte. Antes, tendrán lugar, en el centro de la ciudad de Cañete, la segunda jornada de la competencia documental de “Pueblos Originarios”, y la inicial sesión por la disputa al premio mejor cortometraje “Corto, Escuela, ¡Acción!”.
