Habló de su hija trans
Luego del revuelo que provocó que la hija de la vocera del llamado Bus de la Libertad asumiera públicamente su identidad de mujer, y de su constante oposición a la Ley de Identidad de Género, Marcela Aranda asistió al programa lo que generó malestar en diversos televidentes por sus dichos discriminatorios e intolerantes.
El pasado 8 de enero, Marcela Aranda, conocida por ser la vocera del Bus de la Libertad, asistió a La Mañana de CHV para hablar de su hija que públicamente había manifestado que era una persona trans.
Las declaraciones de Aranda generaron 374 denuncias de los televidentes en el Consejo Nacional de Televisión, quienes cuestionaron principalmente su intolerancia a la diversidad sexual.
«Utiliza conceptos discriminatorios, acusa un plan de ‘reingeniería social’, expone que es intolerante a lo que considera malo: diversidad sexual, fomenta la ignorancia y la intolerancia. Discurso discriminatorio. El programa y su línea editorial, permiten que siga negando la identidad sexual de su hija, vulnerando sus derechos», son los principales cargos que llegaron hasta el CNTV.
¿Qué dijo en el matinal?
«Él jamás manifestó una condición ni siquiera como afeminada que tu podrías decir tiene una tendencia. Para nada. Nada, nada», insistió y se refirió a Carla por su nombre de nacimiento a pesar de que haya manifestado públicamente su identidad de género como mujer.
Además, explicó que guardaba fotografías e informes sicológicos de su hija que probaban que no tenía conflictos con su identidad sexual y afirmó que su disforia de género es producto de una historia familiar.
«Si yo tengo un hijo que tiene diabetes no le voy a permitir que coma una torta entera. Esto no es distinto», sostuvo.
Incluso citó un pasaje de la Biblia: “Aunque se cambie de nombre y de apellido, será siempre su hijo. Aunque se cambie su nombre a de niña, siempre será su niño. Y aunque se llame Carla, siempre lo amará. Y aunque se ponga al lado del Diablo mismo, lo esperará de vuelta, como mirando a un horizonte, junto a una vieja puerta, para que regrese a la vida su hijo, su amado, su niño. Porque ella fue madre de un varón, y fue ella quien lo puso en hombre».
En cuanto a las declaraciones de su hija, se mostró preocupada porque «mintió» al decir que la había echado de la casa y aseguró además «no había falta de amor».
«Él es un hombre adulto que puede tomar la decisión. Pero yo conozco a mi hijo», agregó y responsabilizó al Movilh por aprovecharse de su hija.
«No estoy luchando contra él, estoy luchando por él (ella)», dijo y aclaró que «antes de ser dirigente o madre lo que sustenta mi vida es la fe».
