Acoso en el cine
Björk acusó indirectamente en las redes sociales al director danés Lars von Trier de haberla acosado sexualmente durante el rodaje de Dancer in the Dark.
En un mensaje en Facebook, la cantante islandesa Björk compartió su experiencia «con un director danés» sin citar su nombre. Sin embargo como la única película que ha rodado es Dancer in the Dark (2000), del cineasta Lars Von Trier, se asume que es él de quien habló, sobre todo porque fue pública su relación conflictiva con el cofundador del movimiento Dogma.
La artista islandesa resaltó que como venía de uno de los países con mayor igualdad entre sexos y por su influencia musical estaba acostumbrada a ser independiente, pero aún así le quedó claro desde el principio al entrar al mundo del cine que la «humillación» y el «acoso sexual en grado menor» que sufrió era la norma general para el director y su equipo, que «lo hacían posible e incitaban a ello».
«Me di cuenta de que es algo universal que un director pueda tocar y abusar de las actrices a su voluntad y que el mundo del cine lo permite. Cuando lo rechacé de forma repetida, se enfadó, me castigó y creó para su equipo una red de ilusión en la que yo parecía la difícil», aseguró la cantante.
Su fuerza, el apoyo de su gente y no tener interés en una carrera cinematográfica le permitieron superarlo en un año, según Björk, quien denuncia ahora los hechos inspirada por otras mujeres que han hecho lo mismo recientemente, en alusión a las acusaciones de agresión sexual contra el productor de Hollywood Harvey Weinstein.
Desde que a principios de octubre surgieron las primeras acusaciones contra Weinstein, cofundador junto a su hermano Bob de Miramax y The Weinstein Company, decenas de actrices han revelado que fueron víctimas de las presuntas agresiones y abusos sexuales del poderoso productor, expulsado de la Academia de Hollywood.
«El director era plenamente consciente de este juego y estoy segura de que la película que hizo después estaba basada en sus experiencias conmigo, porque fui la primera que se enfrentó y no le dejó salirse con la suya. En mi opinión tuvo una relación más justa con sus actrices tras la confrontación», afirmó Björk en referencia a Dogville (2003), protagonizada por Nicole Kidman.
La cantante islandesa ganó el premio a la mejor actriz por su papel en Dancer in the Dark, que obtuvo además la Palma de Oro, pero decidió abandonar el mundo del cine a partir de entonces.
Von Trier rechazó sin embargo los dichos de Bjork en declaraciones a la edición digital del diario Jyllands-Posten.
«No ha sido el caso (acoso sexual), pero es un hecho que hubo una gran enemistad entre nosotros. En cambio, realizó una de las mejores interpretaciones que se ha visto en mis películas», dijo el director.
El cineasta danés dijo no sentirse sorprendido porque las acusaciones hayan aparecido tantos años después, ya que según él, Björk «no ha hecho otra cosa que quejarse de mí».
