Yo opino
Esta reflexión contiene spoilers, así que si todavía nos has visto la película y quieres hacerlo, te recomendamos llegar hasta aquí.
Como fan de X-Men esperaba ansiosa el estreno de Logan. Teníamos planeado con mi hijo mayor -de 10 años- ir a verla juntos. Escuché el comentario de Alejandro Alaluf en Siempre es Hoy de T13 radio y me llamó la atención que la calificara de una película violenta violenta, sin calificativo sino que redundancia: violenta, violenta, violenta y recomendada para mayores. En casa decidimos que iría a verla yo primero para luego evaluar si podíamos llevar a mi hijo. Alaluf tenía razón: la película es violenta, de una violencia absoluta, descarnada.
La película es oscura y logra crear una atmósfera en extremo decadente: Logan está viejo y enfermo; Charles Xavier -el cerebro más poderoso de la humanidad- sufre de una enfermedad degenerativa que lo transforma en un arma de destrucción masiva y está al cuidado de un albino, mutante «redimido».
La violencia -absoluta- de la película no radica en la cantidad de muertos producto de las garras de adamantio de Logan; la violencia se hace insoportable al ver cómo se crea esta nueva generación de mutantes en niños que son clonados de células conservadas de las ya extintas generaciones pasadas de mutantes. Los niños crecen encerrados en un laboratorio, entre rejas, sin nombre, sin afectos y sin conocer ni el mar ni la montaña. Una vez que sus creadores determinan que no son domesticables deciden exterminarlos: molestan, son peligrosos, no tienen ni dios ni ley.
[cita tipo=»destaque»] Inevitablemente recordé a Lissette, a nuestros niños del SENAME que han sido vulnerados en sus derechos, a las niñas del «hogar» guatemalteco que murieron quemadas el 8 de marzo y me estremecí… Esa violencia absoluta que nos muestra la última película de la saga de Wolverine no es apta para menores. [/cita]
Entonces, inevitablemente recordé a Lissette, a nuestros niños del SENAME que han sido vulnerados en sus derechos, a las niñas del «hogar» guatemalteco que murieron quemadas el 8 de marzo y me estremecí… Esa violencia absoluta que nos muestra la última película de la saga de Wolverine no es apta para menores, no debe ser vista por mi hijo de 10 años… Sentí que esa censura es la que ha ocultado las sistemáticas vulneraciones a los derechos de nuestros niños no tan solo en los últimos años, sino que a lo largo de la historia. El problema es que Logan muere… ¿Quién salvará a nuestros niños?
