En éste periodo estival, debemos considerar el aumento del contagio del síndrome pulmonar por hantavirus. Anualmente, se diagnostican entre 40 y 60 casos en todo Chile, sin embargo, se trata de una patología grave, donde entre un 30-40% de los casos fallece.
Todos sabemos que durante el verano se producen muchos más casos de Hantavirus que en invierno y, principalmente, tiene que ver con que la gente sale de vacaciones a zonas rurales, hace camping y no toma medidas respecto al manejo de residuos y conservación de alimentos. Pero, ¿qué otros factores incrementan los brotes de la enfermedad?
Posiblemente se deba a la obligada migración de ratones debido a los incendios forestales. Otro factor del aumento de la presencia de los roedores y por ende el aumento los riesgos de contagio, es el florecimiento de la quila y el coligue, donde estos roedores tienen sus madrigueras. Pero, al igual que en el caso de los incendios, hay otros factores naturales que obligan a los roedores a moverse, lo que también genera riesgos: sequías, inundaciones, temblores fuertes, terremotos, actividad volcánica, deforestaciones, cambios en los usos del suelo y urbanización de zonas rurales.
Entre las personas que están más expuestas, y en mayor riesgo de contraer este virus, destacan los trabajadores agrícolas, forestales y aserradores; quienes comparten el hábitat del ratón silvestre; las personas que trabajan en áreas rurales y permanecen en ellas en condiciones precarias; quienes hacen picnic o acampan al aire libre o en zonas de camping; quienes alojan en albergues, cabañas o lugares que han permanecido cerrados por mucho tiempo y las personas que realizan actividades de limpieza en el campo.
Las principales causas de contagio, no sólo van por la línea de contacto directo con el ratón infectado para contraer la enfermedad, ya que, el ratón elimina el virus por la orina, heces o saliva y la transmisión al ser humano es fundamentalmente a través de la vía respiratoria. El Ministerio de Salud advierte que la enfermedad se transmite por: Respirar aire contaminado con heces, saliva u orina de un ratón infectado. Ingerir agua o alimentos contaminados con heces, saliva u orina de un ratón infectado. Ser mordido por un ratón infectado.
El DS 73-2006, Art. 18 MINSAL, se incorpora la infección por Hantavirus como una enfermedad profesional, si es transmitida al ser humano cuando realiza trabajo agrícola, pecuario u otro donde puede estar en riesgo de contacto con roedores. Circular B51/24, 2010 MINSAL, norma la vigilancia y control de la infección por Hantavirus.
¿Cuáles son los síntomas?
Inicialmente, las manifestaciones son muy parecidas a un cuadro gripal:
Luego se agrega:
A diferencia de la gripe, en la fase inicial de la infección por hantavirus es infrecuente el dolor de garganta y la secreción nasal.
Medidas para prevenir el contagio: