Salud
El cáncer de próstata es el segundo más común en la población masculina y desde los 50 años la probabilidad de padecerlo aumenta rápidamente. Pesquisarlo a tiempo permite un tratamiento mucho más efectivo, con altas probabilidades de curación.
Bajo el slogan de su campaña permanente de detección del cáncer de próstata “Uno al año puede salvar tu vida”, la Corporación Nacional del Cáncer (CONAC) ha querido aprovechar este Día de la Salud Próstatica, a conmemorarse el 15 de septiembre, para recordar a los hombres chilenos la importancia de realizarse un control anual para poder detectar a tiempo cualquier trastorno prostático.
La razón es simple: cada año mueren cerca de 2.000 hombres por cáncer de próstata, el cual es la segunda causa de muerte por cáncer entre la población masculina.
Si bien el cáncer de próstata no se puede prevenir, detectarlo en una etapa temprana permite un tratamiento mucho más eficaz, con altas probabilidades de curación. “Por esta razón es tan relevante la detección temprana, sobre todo considerando que el cáncer de próstata no produce síntomas perceptibles por la persona en su etapa inicial”, enfatiza el médico jefe del Servicio de Urología de la CONAC, Dr. Cristián Acevedo. Según el especialista, un cáncer descubierto desde sus comienzos puede ser tan pequeño en tamaño que podría llegar a ser curado sólo con radioterapia o cirugía.
La gran mayoría de los casos de cáncer de próstata se registran sobre los 65 años de edad, por lo que a partir de los 50 años es recomendable que los hombres hagan costumbre el chequeo anual. Aquellos que han tenido familiares directos con esta patología, no obstante, tienen un mayor riesgo, por lo que se aconseja comenzar a los 45 años.
El chequeo cobra relevancia, además, considerando que esta enfermedad no muestra síntomas perceptibles en su fase inicial, por lo que es difícil que un hombre la note por sí sólo. No obstante, existe un rápido test de síntomas prostáticos que puede orientar a un paciente si debe acudir al urólogo. Si se obtienen más de 8 puntos al sumar las respuestas, se debe consultar al médico, siempre considerando que estos síntomas no significa que la persona tiene cáncer de próstata necesariamente.
¿EN QUÉ CONSISTE EL CONTROL DE PRÓSTATA?
El control de próstata consiste en un examen de sangre que determina el nivel de Antígeno Prostático Específico (APE) en la sangre. A esto se suma un examen rectal digital, a través del cual el médico puede detectar anomalías en esta glándula. Ambos exámenes conforman el control de próstata básico.
En caso que en el control rutinario se detecte alguna irregularidad, se procede a realizar dos estudios complementarios -una ecografía transrectal y una biopsia- que permitirán la confirmación histológica del cáncer de próstata
